Julio Algar ha hablado ante los medios después del Sanse 3-0 Cerceda y se mostrado contento por el resultado y el esfuerzo de sus futbolistas. Además, ha alabado a su rival, pese a su último puesto en la clasificación.

Pregunta: Buenas tardes míster. ¿Qué valoración hace del encuentro?

Respuesta: son tres puntos importantísimos para seguir sumando de aquí a final de temporada. Con la dificultad de ganar. Cuesta muchísimo cada semana. Un partido complicado, aunque lo veamos al final de la tabla, el Cerceda llevaba varias jornadas haciendo bien las cosas. Son lo de los partidos que se valoran menos, pero te hacen estar en una posición un otra? 

P: ¿Le ha decepcionado el Cerceda?

R: Ha sido un partido más cómodo a partir de la expulsión, pero al principio con el 1-0 es un resultado engañoso. Han tenido ocasiones y son buenos jugadores, pero hay que valorar a nuestros jugadores por el trabajo. Hemos tenido el balón y calma con un jugador más. También pensando que el próximo viernes tenemos otro partido. A veces jugando con diez hay partidos que se complican. No ha sido el caso.  

P: Con 45 puntos ya, ¿cuál es el objetivo del equipo?

R: El mismo que el que teníamos cuando llegué el primer día. Pensar en el próximo partido. Ahora toca el Toledo. No podemos pensar más allá. Lo dije cuando perdimos en Segovia. Y una vez que juguemos en Toledo pensaremos en el siguiente. Así nos irá bastante mejor y sobretodo tener la atención de que cada partido es crucial.  

P: El próximo partido es contra el Toledo, ¿es de esperar un encuentro diferente al de este domingo?

R: Sí, es un equipo con buenos jugadores y en su casa. Además, viene de ganar al Fuenlabrada. Están en una situación complicada y nos vamos a encontrar un equipo muy peligroso. Como todos los que vengan. A partir de ahora será sufrir y lo que tenemos que hacer es lo que vienen haciendo los jugadores: estar bien, disputar cada balón hasta el final. Estando así tendremos menos problemas que estando relajados. Intentaremos que no ocurra y seguir sumando puntos. También que la gente se vaya a su casa con que su equipo ha ganado.