Llegó la hora de la verdad. La Liga 1/2/3 alcanzó su momento clave, y las cábalas de unos equipos y otros entran en escena con la intención de cumplir objetivos. El Lugo se topó en Tarragona con una lucha más comprometida que la suya, la permanencia. En una temporada ‘cómoda’ en la que el casillero lucense está bien armado a nueve jornadas para el final, toca empatizar y competir contra conjuntos en pleno conflicto. Atendiendo al espirituloitador del que se parece contagiar Francisco, la exigencia a los futbolistas se mantiene. Luchar por el playoff es un premio que los jugadores se han ganado, por lo que no se puede abandonar la idea de promocionar mientras que los números lo permitan. Este año el descenso es cosa de otros.
Alineaciones impredecibles
El fondo de armario del que presume Francisco fecha tras fecha volvió a entrar en escena. Labor complicada la de afinar con la formación por la que apostará el técnico cada fin de semana, ya que la confianza en el grupo es plena, y cualquiera puede partir de inicio. En esta ocasión, los revulsivos Barco, Albarracín y Campillo volvieron a estar entre los 11 elegidos -10 obviando a un Juan Carlos que lo juega todo-. Romero regentó el ala derecha de Iriome, y Pita fue de nuevo el faro de un Lugo que no encontró puerto. Nano Rivas sorprendió con un cambio de sistema –del 4-4-2 al 4-2-3-1- en el que la dupla Uche-Barreiro se quedó en la banqueta, y en el que Álvaro Vázquez fue la referencia ofensiva.
El parte de malas
Una caída fortuita al comienzo del segundo acto dejó KO a Mario Barco. El puma de Calahorra sufrió un aparatoso golpe a la hora de intentar rematar un centro desde la izquierda y tuvo que salir del terreno de juego con cabestrillo ante sus dolencias en el hombro. Tras las pertinentes pruebas médicas se le detectó una luxación. Chuli apunta a titular las próximas jornadas.
Por otro lado, tanto Zaragoza, Valladolid, Numancia, como Tenerife –rivales directos del Lugo por el playoff- resolvieron sus correspondientes compromisos con victoria. Semana gris para el conjunto rojiblanco en cuanto a situación clasificatoria, aún así, el sexto puesto se distancia a solo cuatro puntos.