Este mismo sábado, el Betis recibirá al Eibar en el Benito Villamarín. Tras el partido ante la Real Sociedad en Ipurúa, se presenta una cuestión importante que Mendilibar deberá reflexionar. Charles cayó lesionado en el encuentro y estará de baja entre cuatro y seis semanas, algo que hace imposible la utilización de dos delanteros como suele hacer el técnico natural de Zaldivar. Lo más probable es que alinee a Joan Jordán como falso nueve, es decir, algo más retrasado que Kike García aunque sin ser del todo mediapunta. 

El centrocampista catalán quiere volver a ser importante en el esquema armero, y de hecho, tomará una responsabilidad importante. Jugar como falso nueve implica una movilidad y una participación alta en el juego, debe ser dinámico y buscar siempre la creación de una acción que lleve a acabar la jugada con una ocasión de gol. 

Además, en esta posición el futbolista debe tener llegada, debe ser determinante en las acciones que realice y aportar además de visión, gol, para complementar al delantero que tenga por delante. Jordán deberá cumplir con estas funciones para ser importante en el choque, es una posición vital en la que recae mucha parte de la creación de jugadas y tratará de cumplir con éxito.

Lo cierto es que el centrocampista ex del Espanyol ya ha demostrado su capacidad en algunos partidos. La irregularidad, algo que ya le ocurrió en equipos como el Valladolid, es lo que le está haciendo carecer de más minutos. Sin duda demostrar un buen papel en este encuentro sería fundamental de cara a sus intereses. Ya ha demostrado que tiene gol, siendo uno de los centrocampistas más goleadores de La Liga, además, también ha mostrado su capacidad para asistir, tocar con criterio, y crear ocasiones de gol.

Ahora Jordán se enfrenta a un reto importante, en el que asumirá galones en un estadio complicado, con el objetivo de mover al equipo para conseguir los tres puntos y así mantener al Eibar en la pelea por algo grande.