Ese jueves, los de Ernesto Valverde han cambiado el chip en la Ciutat Esportiva Joan Gamper. Con vistas al duelo que este sábado disputarán contra el Leganés de Asier Garitano, los azulgranas han cambiado la mentalidad que ya deja atrás la ventaja que ayer consiguieron imponer ante la Associazione Sportiva Roma antes de aterrizar en el Olímpico de Roma.

Antes de sentenciar la eliminatoria para conseguir el billete para estar en las semifinales, los azulgranas recibirán en el Camp Nou al Leganés para disputar el partido correspondiente a la jornada 31 de LaLiga Santander. En el tramo más decisivo, los de Ernesto Valverde quieren tener todos los sentidos activos para conseguir prorrogar la racha de imbatibilidad, reafirmándose en el primer puesto de la clasificación como líderes de una competición en la que esperan, cuanto antes, entonar el alirón.

En el Tito Vilanova, los jugadores disponibles del primer equipo salían a entrenar con Aleñá, Riqui Puig y Varo, jugadores del filial azulgrana, con vistas a preparar el duelo ante el conjunto madrileño. 

En una sesión preparatoria celebrada a puerta cerrada, los jugadores ya miran hacia el duelo de esta próxima jornada ya que este partido podrá servirles a los azulgranas para igualar el récord de partidos consecutivos sin conocer la derrota en la competición doméstica, que actualmente está en manos de la Real Sociedad. El feudo culé se ha convertido en el escenario de una racha inexpugnable que muy pocos rivales han conseguido franquear.

Después de esta sesión de recuperación, los azulgranas volverán a ejercitarse en la Ciutat Esportiva este viernes antes de recibir la visita del treceavo clasificado de LaLiga Santander con vistas a ampliar la ventaja respecto a sus rivales más perseguidores y evitar que el Atlético de Madrid recorte distancias en el duelo que disputarán contra el tercer clasificado, el Real Madrid, en el Santiago Bernabéu.