El FC Barcelona tiene pie y medio en las semifinales de la Champions League tras derrotar por 4 goles a 1 a la Roma en la ida de los cuartos de final, en un partido dónde los de Valverde quizás no mostraron su mejor cara en cuanto a juego pero fueron efectivos y fiables como se están mostrando a lo largo de la temporada.

El resultado es bastante engañoso ya que la Roma plantó cara y se mostró como un conjunto atrevido que llegó a poner en apuros al conjunto azulgrana pero que fue muy castigado en defensa, dónde marcaron dos goles en propia porteria. Piqué y Luis Suárez se encargaron de anotar los dos goles restantes y Edin Dzeko anotó el gol del conjunto italiano que les da una brizna de esperanza, aunque las opciones de pasar son mínimas.

Asociación Semedo - Roberto

Ernesto Valverde está mostrando que en competición europea quiere, sobretodo, que su equipo esté compacto y sea fiable atrás y, a partir de ahí, empezar a construir. Con esta consigna más que clara, el Txingurri quiso sobretodo protegerse de Perotti y, como Dembélé mostró dificultades ante el Sevilla al realizar tareas defensivas y le costó cubrir al lateral, el técnico extremeño optó por alinear a Sergi Roberto por delante de Semedo en un 4-4-2 para dejar esa banda bien cubierta.

Así pues, seguramente vimos una de las mejores versiones de Semedo, muy atento en defensa desactivando al argentino Perotti y realizando incursiones por la banda, mientras que Sergi Roberto mostró la buenísima versión a la cuál tiene habituados a los culés, aportando trabajo, asociación y seguridad.

Semedo y Roberto formaron dupla en banda derecha | Jordi Grífol - VAVEL
Semedo y Roberto formaron dupla en banda derecha | Jordi Grífol - VAVEL

La Roma, valiente y atrevida

El conjunto italiano posiblemente salió más castigado de la cuenta en un encuentro que Di Francesco planteó con atrevimiento con un 4-3-3 con la defensa adelantada, presionando arriba y buscando tener el control del partido, tarea muy complicada ante un equipo como el Barça y que, posiblemente, es difícil aguantar al mismo ritmo durante 90 minutos. Además, el marcarse dos goles en propia meta, psicológicamente, debió afectar a la Roma que posiblemente se vino abajo a partir de eso y, mientras ellos no aprovechaban sus ocasiones, el Barça lo hacía con efectividad máxima.

El conjunto romanista es de los más peligrosos a balón parado aunque eso lo debió trabajar muy bien Ernesto Valverde y sus pupilos lograron minimizar esa virtud de la Roma.

La defensa de la Roma estuvo muy adelantada | Jordi Grífol - VAVEL
La defensa de la Roma estuvo muy adelantada | Jordi Grífol - VAVEL

Luis Suárez vuelve a marcar

Luis Suárez se encuentra en un momento muy dulce sobretodo en competición liguera, pero aún no había conseguido anotar en la Champions esta temporada, cosa que acabó solucionando en las postrimerías del encuentro, tras 90 minutos intentándolo sin cesar. Así pues, pone fin a una racha negativa en la que desde el 8 de marzo de 2017, no conseguía un gol en la competición europea. Sin duda, este gol le va a dar moral y confianza tras tanto tiempo buscando el tanto sin éxito y se verá si este gol acaba desembocando en una racha positiva también en Champions.

En este encuentro ante la Roma, se vio a un Suárez cayendo mucha a la izquierda para intentar crear espacios, aunque lo cierto es que en dicho encuentro al Barça le costó generar espacios a la espalda de los centrales, pese a que estos estaban muy adelantados.

Suárez cayó varias veces a la banda izquierda | Jordi Grífol - VAVEL
Suárez cayó varias veces a la banda izquierda | Jordi Grífol - VAVEL

Efectividad y pragmatismo 

En conclusión, Valverde quiso cerrar la eliminatoria en este encuentra para ir a Roma con cierta ventaja y la verdad es que la jugada le acabó saliendo bien y, aunque es cierto que el conjunto azulgrana no estuvo fino en lo que a juego se refiere, aprovechó muy bien sus ocasiones y acabó noqueando al conjunto italiano con muy poco. Esto se debe a la fortuna con la que se anotaron los goles y por la efectividad del cuadro azulgrana que, como se ha demostrado en muchas otras ocasiones esta temporada, muy poco les basta para anotar. Está claro que la mayoría de afición culé quiere que su equipo juege de la mejor forma posible pero, en encuentros de Champions, el técnico azulgrana prefiere seguridad y pragmatismo pero acabar ganando. Eso sí, en todo momento el FC Barcelona buscó tener el balón y dominar el encuentro, aunque posiblemente también se notó cierto cansancio en algunos jugadores tras el parón de selecciones y el duro y exigente encuentro en el Ramón Sánchez Pizjuán.