La tarde noche del sábado nos brindaba un partido entre el Real Madrid Castilla y el club deportivo Cerceda en el madrileño estadio de la ciudad deportiva Madridista, Alfredo Di Stefano. Ambos equipos llegaron a la jornada 33 del grupo I de la Segunda división B con apuros y en una mala racha de resultados. El equipo local, afrontaba la cita sin conocer la victoria en ninguno de los cinco encuentros previos y anotando un solo gol, en estos enfrentamientos. Este gol fue marcado por Fidalgo, en el empate ante uno frente al la Unión Adarve.  Los rojiblancos por su parte, ganaron su último encuentro hace tres jornadas frente frente al frente al Toledo, frente al Toledo tras frente al Toledo tras remontar un resultado adverso de 2-0 en el Salto del Caballo.

 

Comienzo igualado

 

El partido comenzó muy igualado aunque con un claro dominio blanco. Los hombres de Solari pusieron sus intenciones que alas primeras de cambio con llegadas al área del portero gallego y con Fidalgo y Cristo como máximos protagonistas. Los visitantes solo iban iban acechar la puerta de Luca Zidane en dos tímidas ocasiones, ambas por las bandas, pero en ninguna de ellas consiguieron encontrar un rematador rojiblanco, y acabaron con continuos despejes de la defensa merengue, que estuvo muy organizada y segura durante toda la primera mitad.

 

El marcador se abrió en el feudo blanco a falta de 10 minutos para la conclusión de la primera mitad del choque, una jugada colectiva del equipo merengue, comenzada desde la zaga y continuada por un gran Franchu, que conectó un centro por bajo para el delantero madridista Cristo, que iba a cruzar el balón con un disparo a media altura, lejos del alcance de Mangunazelaia, el portero del CD Cerceda en el día de hoy.

Cristo, en la celebración de su gol // Fuente: Dani Nieto (VAVEL)
Cristo, en la celebración de su gol // Fuente: Dani Nieto (VAVEL)

Tras el gol, el partido continúo con la misma dinámica y el Real Madrid pudo ampliar la ventaja con un disparo de Tejero que bloqueó el meta rojiblanco.

 

Segunda parte goleadora

En la segunda mitad los goles iban a llegar al marcador de Valdebebas. En primer lugar, en el minuto 47, un tanto de Quezada iba a llegar tras un gran centro de Franchu que llegaría a la bota del 11 madridista para que esté empalase al palo largo de la portería defendida por Mangunazelaia. Un disparo muy bueno desde la frontal del área de los visitantes iba a poner el 3-0 en el marcador y la tranquilidad para Solari y sus hombres.

 

Quezada, celebrando el tercer gol // Fuente: Dani Nieto (VAVEL)
Quezada, celebrando el tercer gol // Fuente: Dani Nieto (VAVEL)

A partir de este gol, el meta del real Madrid iba a ser protagonista por dos errores, que iban a colocar los dos tantos para el equipo rojiblanco. En primer lugar, un disparo de Pedrosa endemoniado iba a resbalar en las manos de Luca y haría que se colaría en la portería del meta francés. Este gol pondría el 3-1 y la emoción de nuevo a un partido muy vistoso. el siguiente tanto iba a ser una obra de arte de Franchu, que se postuló como el mejor jugador del partido tras anotar su segundo gol, un tanto maradoniano tras zafarse de tres defensas y del portero finiquitando un precioso disparo al palo corto, que sellaría su doblete y el 4-1 en el marcador.

 

Todavía no se había recuperado el público asistente al encuentro del fallo de Luca, cuando tras un centro que se desviaba por la banda, el portero decide salir, pero lo hace con un exceso de confianza que le lleva a perder el balón y a quedarse inmóvil tras el tiro de Kike Pérez, que se cuela en las mallas tras pasar muy cerca del palo de la portería.

 

Conclusiones

El partido acabó 4-2 y los tres puntos se quedaron en el feudo madridista. Con este resultado, los blancos se aúpan hasta la décima posición, con 44 puntos, a dos del Talavera, noveno clasificado. Los gallegos, siguen en el fondo de la tabla con tan solo 23 puntos, y hacen que la permanencia sea cada jornada más difícil.