Con la llegada de Ziganda al Athletic muchas cosas están cambiando y lo cierto es que muy pocas lo están haciendo para bien. El técnico de Larráinzar no está a la altura de las circunstancias y parece desbordado por un equipo que está realizando una temporada para el olvido. La mala imagen en los encuentros, la poca preparación física que demuestran los futbolistas y la poca competitividad en todas las competiciones que han afrontado se han unido, al término del curso, a una de las decisiones más polémicas que ha tomado el ex del Bilbao Athletic: sentar a Aritz Aduriz. Desde luego, esta determinación parece algo osada, pues el entrenador ha tocado uno de los puntos sensibles de la hinchada rojiblanca.

Por si no fuera poco con el mal transcurso de la temporada, Ziganda parece haber apostado definitivamente por un Iñaki Williams que da una de cal y otra de arena en la punta de ataque. Si bien ante el Celta de Vigo en San Mamés y frente al Villarreal en el Estadio de La Cerámica fue uno de los elementos claves para el Athletic, el partido ante el Deportivo de la Coruña sirvió para demostrar la gran diferencia que hay entre el joven de Bilbao y el ariete donostiarra. Más móvil, rápido e incisivo el primero, se echa en falta el olfato goleador y la pillería en el área del segundo. Teniendo en cuenta que la trayectoria de uno y otro en el fútbol es muy distinta y que la experiencia es un plus, si cabe, aún más dentro del área, Williams parece no ser el reemplazo idóneo de un Aritz Aduriz que puede ser el único que no olvide este curso.

Aduriz ya suma once suplencias en liga esta temporada, solo dos menos que en el curso 2007/2008

Y es que, el número '20' del conjunto rojiblanco va camino de sumar su temporada con más suplencias en Liga. En el presente curso, Aduriz ya suma once partidos ligueros en los que no arranca en el once titular. Está, pues, a solo dos de los cosechados en la temporada 2007/2008, cuando alcanzó la cifra de trece suplencias ligueras. En aquel año, el delantero acumuló, además, ocho encuentros consecutivos partiendo desde el banquillo de los cuales, en tres, ni siquiera jugó. Algo parecido está sucediendo esta campaña, pues ya suma seis al hilo sin participar entre los once titulares y, de ellos, en dos no se ha vestido ni de corto. Desde luego, la situación no parece idónea para un futbolista que, si bien va acumulando años, sigue dejando datos estratosféricos.

Muniain, Iago Herrerín, Aduriz y De Marcos en el banquillo frente al Celta | Fotografía: LaLiga
Muniain, Iago Herrerín, Aduriz y De Marcos en el banquillo frente al Celta | Fotografía: LaLiga

La temporada con menos partidos disputados en Liga

Las estadísticas de Aduriz este año no son del agrado ni del jugador ni de la hinchada. Además de poder ser el curso con más suplencias, el donostiarra puede cuajar la temporada completa con el Athletic con menos partidos jugados. Suma 29 de los 32 choques que ha jugado el equipo, solo dos menos que los disputados en los cursos 2013/2014 y 2014/2015. Aunque es cierto que puede acumular esos 31 duelos que dejarían igualados sus peores registros. Llama la atención que el donostiarra solo haya acumulado más encuentros que en las dos campañas en las que no estuvo durante todo el año futbolístico en el primer equipo rojiblanco.

Aduriz puede cuajar la temporada completa con el Athletic con menos partidos jugados

Así pues, en la temporada de su debut en el primer equipo, Aduriz sumó apenas tres choques, todos ellos como suplente. Era la temporada 2002/2003 y, bajo las órdenes de Jupp Heynckes, se vestía por primera vez de corto en liga para medirse al FC Barcelona en un partido que los vascos perdieron 0-2. Ya en la 2005/2006, llegó en el mercado de invierno del Real Valladolid para convertirse en una pieza clave de los planes de Javier Clemente, quien depositó en él la confianza de cara a un final de temporada en el que logró sumar quince partidos y seis goles.

Otro dato reseñable es la curva que hace su media de minutos por partido en lo que a la competición liguera se refiere. En la ya mencionada temporada 2005/2006, el donostiarra alcanzó los 74,53 minutos por encuentro, una cifra que no volvería a repetir hasta el curso 2013/2014. Entre medias, la también mencionada temporada 2007/2008, en la que las constantes suplencias minaron la estadística del goleador. Un promedio de 58,33 minutos por choque antecede al 64,52 de esta temporada, tercera con peor media. Este dato aún se puede resentir más en los partidos que restan de curso, aunque parece complicado que se rebaje la cantidad de minutos de la temporada de Caparrós.

Dos entrenadores, dos importancias

En épocas totalmente distintas y con edades diferentes, la etapa de Valverde y la de Ziganda están claramente distanciadas, y no solo en lo que a nivel deportivo se refiere. Los datos del navarro se resienten también en lo que a Aritz Aduriz se refiere, pues con él apenas suma 69,45 minutos por encuentro. En el otro lado está el de Viandar de la Vera, que dio protagonismo a su mejor hombre en ataque para no complicarse la vida. Un promedio de 77,22 minutos por encuentro se desprende de los 13.977 minutos sumados en 181 partidos en total. Como no podía ser de otra manera, a menos minutos, menos goles. Y es que, mientras que con el actual técnico suma 0,47 tantos por partido -19 en 44 encuentros- con Valverde alcanzó los 0,57 goles por partido -104 en 181 duelos-.

Ziganda llegó con la intención de cambiar el Athletic y parece que todo va a desencadenar en un cambio del club sobre el entrenador. El de Larráinzar no ha conseguido dar con la clave para recuperar a un equipo que no es diferente al que tenía Valverde y que cuenta, si cabe, con mayor experiencia de los jóvenes que se vienen desarrollando desde el filial. En lo que Aduriz respecta, si bien es cierto que va sumando años, estos no han repercutido en los números del que es uno de los mejores delanteros rojiblancos de la última década. Queda por ver qué sucede con el entrenador y el futbolista, pero todo apunta a que la temporada que viene no seguirán juntos en el mismo barco.