El pasado fin de semana el CD Lugo viajó a Soria para enfrentarse al Numancia en lo que terminó siendo un aciago partido para el conjunto gallego. Los pupilos de Francisco Rodríguez apenas generaron peligro, dejando a un lado su juego colectivo característico para centrarse en generar ocasiones al contragolpe, algo que no les salió bien visto lo visto sobre el verde. El Numancia dominó el partido prácticamente de principio a fin y, pese a gozar de varias buenas ocasiones, se tuvo que conformar con un 2-0. Y si no fueron más fue gracias, o al menos en parte, al trabajo del meta visitante Juan Carlos, quien detuvo un sinfín de ocasiones rojillas.

El meta guadalajareño fue, posiblemente, el mejor del Lugo en el partido. Algo que alarmantemente se está convirtiendo en costumbre en el conjunto gallego. Si bien es cierto que en anteriores partidos el juego del equipo fue mejor y se crearon más oportunidades, el cancerbero albivermello acostumbra a sacar las castañas del fuego al club lucense en muchas ocasiones.

El Lugo, que lleva toda la temporada acusando la falta de gol (sólo 34 goles en 35 jornadas), no había tenido sin embargo problemas con su juego. En Soria, en cambio, el Lugo estuvo irreconocible. Bien por el planteamiento del entrenador albivermello, bien por el dominio sobre el césped del Numancia.

Sin ocasiones es imposible anotar, por lo que ante la falta de goles cobra mayor importancia la figura del portero, de Juan Carlos. El meta está destacando últimamente gracias a su buen rendimiento y a sus paradas, que en muchas ocasiones han supuesto puntos. Indiscutible desde su llegada, Juan Carlos, quién recordemos anotó un gol desde su campo esta misma temporada que le sirvió -junto a sus paradas-, para ser elegido como el Jugador del Mes en LaLiga 1|2|3 en enero, es uno de los pocos jugadores del club gallego que mantienen un nivel estable y destacado en lo que va de liga. La labor del guardameta, sin embargo, no está siendo correspondida con los resultados, ya que últimamente el Lugo está atravesando una crisis de resultados y de falta de gol importante.