Ya con la Liga perdida y con una segunda plaza que peligra, el entrenador del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone, salió ante los medios de comunicación para mostrar sus sensaciones. El técnico no ocultó el mal sabor de boca con el que vuelven a Madrid tras la goleada encajada en Anoeta ante una Real Sociedad que fue muy superior y a la que felicitó por su buen juego. También reconoció la fragilidad que muestra el equipo en los últimos partidos lejos del Metropolitano tiempo que dijo haber "observado" la fragilidad que tiene su equipo.

"Es algo que venimos observando en los partidos de liga y también en Europa League. Hay que estar atentos porque nos están haciendo mucho daño fuera de casa", reconoció el preparador argentino al comienzo de la rueda de prensa.

Sobre este asunto quiso profundizar más, al decir que no está "preocupado" porque en los últimos partidos fuera del Metropolitano la imagen dada por su plantilla no siempre fue igual de deficiente que la que transmitió en el encuentro en San Sebastián.

"Ante el Villarreal el partido fue mucho más parejo, con el Real Madrid lo mismo, también el segundo tiempo en Lisboa. Hoy hicimos una mala primer mitad, en la segunda mejoramos pero faltó regularidad para acercarse en el marcador", aclaró Simeone.

En, prácticamente, la totalidad de ataques rojiblancos, el colegiado señaló posición ilegal, algo en lo que el técnico no estuvo muy de acuerdo. Consideró que anularon dos claras jugadas de gol a su equipo "en mano a mano con su arquero", tanto de Gameiro como de Torres. Dos acciones que pudieron cambiar el rumbo del choque.

"El árbitro lo vio así pero en alguna de esas jugadas hasta la grada vio que no era fuera de juego, aunque no puedes decir eso cuando has perdido 3-0 porque tampoco estuvimos finos", concluyó Simeone.