La misma historia se repite. Partido perdido, semana difícil debido al estado anímico de la afición, a las bajas del equipo... Pero el aficionado recobra la ilusión, a pesar de estadísticas y demás cifras, de cara al vital encuentro del Carlos Tartiere, que es una final para los blanquivioletas de cara a la lucha por los playoffs.

El debut de Sergio González frente al Sporting dejó un gusto agridulce. Una dolorosa derrota con un once parecido al que hubiera sacado Luis César Sampedro, pero no fue una derrota merecida, había un toque distinto. Esas sensaciones es a lo único que se aferra la afición blanquivioleta, ya que las cifras fuera del José Zorrilla son desastrosas.

El Oviedo llega al encuentro de este viernes, después de una victoria por la mínima frente al Nástic de Tarragona 1-0, gracias al solitario gol de Saúl Berjón, lo que sería su segunda victoria seguida. Los carbayones han mostrado una irregularidad de resultados tras la victoria por 2-1 en el derbi asturiano, diez partidos en los que sólo han conseguido la victoria en tres, otros tres acabaron en empate y cuatro derrotas.

Los azulones tienen un rendimiento bueno en el Carlos Tartiere. En los 17 encuentros que han jugado en su estadio, el Oviedo ha logrado once triunfos, cuatro empates y dos derrotas, unas cifras de equipo de ascenso directo. Además, el conjunto dirigido por Anquela recibe pocos goles en su casa, con sólo trece goles en contra.

Si sumamos estas estadísticas de los asturianos, a los números y sensaciones de los albivioletas fuera de Valladolid, no hay muvha esperanza para el equipo de Sergio González. El pucela no gana fuera de casa desde enero de este 2018, con el 0-1 que se logró en el Mini Estadi ante el FC Barcelona, y en los últimos seis partidos lejos de tierras castellanas, el Valladolid sólo ha metido un gol. Datos pobres para un club que, presublimente, pelea por los puestos de promoción.

Pero el pesimismo blanquivioleta para el próximo partido, no sólo es incentivado por estas cifras, el Real Valladolid ha viajado a Oviedo con siete bajas, con nombres importantes como los de Gianniotas, Deivid, Cotán, Chris Ramos y Ontiveros por lesión, más las sanciones a Borja y Toni Martínez por acumulación de tarjetas.

Va ser un encuentro difícil y complicado para el equipo de la ciudad del Pisuerga, pero tendrá que confiar en los jugadores que tiene disponibles Sergio y la sangre nueva que pueden aportar jóvenes de la cantera como Mayoral o Luis Suárez. Es la última oportunidad para subirse al tren de unos posibles playoffs.

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