Hace casi seis meses que el Córdoba cayó en puestos de descenso, es la primera vez que sale, por lo menos hasta el domingo a expensas de lo que hagan el resto de equipos que aún tienen que jugar su partido. 

Lo que no se le puede negar a este equipo es sin dudad, la capacidad de reacción y de compromiso que están demostrando, sin duda alguna, el equipo califal tiene toda la pinta de que conseguirá la salvación, ya que le tónica del equipo es ascendente. 

Sandoval comenzó la comparecencia alabando a su afición, de la que dijo: "Un diez a la afición que hay que multiplicarlo por mil, porque el estadio vibró y llevó al equipo en volandas, apretó a la gente cuando sus jugadores tenían decadencia en faltas, sin ellos sería imposible"

El estado anímico de los jugadores era inmejorabale como declaró Sandoval: "Como era de suponer en el vestuario hay mucha alegría, pero no fiesta. Mañana a las 9:30 horas a entrenar, pero están felices porque detrás de ellos hay mucha gente, la comunión es la ideal para conseguir el objetivo, pero tienen que volver con el Huesca y el Almería".

El técnico del equipo blanquiverde volvió a apelar a la calma: "Ahora hay que seguir ganando partidos, porque ya estamos en igualdad con Alcorcón y otros que se daban por inalcanzables". En un nuevo panorama en el que Sandoval apuntó:  "ahora se siente más responsabilidad, aunque el margen de error empieza a ser mayor si viene algún partido malo. Yo estoy contento por toda la gente que está detrás. Ojalá en dos o tres jornadas estemos fuera del descenso de verdad".

Todos unidos, esa es una de las premisas favoritas de Sandoval, el cual declaró: "Es un camino que lo estamos consiguiendo poco a poco entre todos. Gracias a estos jugadores y vestuarios los vamos a conseguir,  los goles fueron calcados a lo que trabajábamos, también hay que darle el valor a un rival que ganó en Zaragoza. Se llevó el partido a donde se quiso. El Sevilla te propone esto, ido y vueltas continuas, se falló un penalti y pudo ser un 4-0, así que cuando se gana 3-0 no hay ningún partido malo".

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