Francisco compareció en la rueda de prensa posterior al encuentro correspondiente a la trigésimo sexta jornada de La Liga 1|2|3, para valorar el empate cosechado ante el Lorca de Fabri que sabe a poco para los lucenses después de disputar un discreto partido. Hoy cumplió el segundo partido de sanción y frente ya se podrá sentar en el banquillo del Sadar frente al Osasuna el próximo sábado.

El preparador rojiblanco es consciente de la mala situación que atraviesa su equipo y se muestra insatisfecho con el final de temporada que están realizando. Si por algo se caracterizaba el Lugo a lo largo del curso, era de llegar muy vivos y fuertes al final de los partidos. Desde hace ya muchas jornadas esa “chispa” de los jugadores desapareció y Francisco reconoce que “el equipo llega al final de una manera que no llegábamos antes”. El empate de hoy, a parte de no haber disputado un buen partido, lo relaciona con la mala forma física del equipo en la recta final de la temporada. Reconoce que han llegado “muy cansados al final” y eso explica no haber sabido manejar los minutos finales.

Sobre los abucheos de la afición al finalizar el encuentro opina que: “Debemos respetar al máximo lo que puedan decir porque la realidad es la que es”. El enfado de la afición se debe, sobre todo, al observar aptitudes de algunos jugadores que han bajado su rendimiento de manera ostensible. Asegura que la única manera para competir como lo hacían antes es “seguir trabajando”.

Con el resultado de esta jornada, el Lugo sigue sin conseguir la tan ansiada cifra de los 50 puntos y se queda en 12ª posición, pero ya ve muy de cerca a perseguidores como Reus y Albacete que pueden superar al conjunto lucense el próximo fin de semana.