Leo Messi sigue haciendo historia con la elástica blaugrana y ha vuelto a demostrar, una vez más, por qué es considerado uno de los mejores jugadores de la historia. El delantero rosarino salía al terreno de juego del Wanda Metropolitano con la intención de liderar el ataque en una noche de espectáculo. Cuando comenzó la goleada, el argentino buscaba el esférico de forma continua para aportar su granito de arena en el duelo copero y para alzar, cuanto antes, la 30ª Copa del Rey.

Con el gol anotado en el estadio del conjunto colchonero, el dorsal 10 del Fútbol Club Barcelona se atribuía otro récord individual: llegaba a las cuarenta dianas esta temporada. Pero para Leo, el marcar goles no supone nada nuevo y en las anteriores campañas, ya ha superado esa cifra.

Explotando como goleador en la temporada 2008/09, en la que firmó treinta y ocho dianas, el talento comenzaba a resarcirse en todos y cada uno de los estadios que pisaba, siendo capaz, en más de una ocasión, de alcanzar la cincuentena. Con el récord personal marcado en 73 goles en una misma temporada, 50 de los cuales los hizo en la competición doméstica, Leo no se conforma con nada y sigue superándose a sí mismo. 

En todas las finales de Copa del Rey que ha disputado el conjunto azulgrana, el argentino ha sido el foco de atención, marcando en cinco duelos coperos diferentes, algo conseguido por Telmo Zarra, que marcó hasta ocho dianas entre 1942 y 1950.

Con el gol que el argentino puso en la escuadra de David Soria en el minuto 30 de partido, después de un taconazo de Jordi Alba hacia dentro del área, el 0-2 supuso otro récord más para su ya colección, habiendo marcado anteriormente, en las finales de 2009, 2012, 2015 y 2017.