El Estadio José Rico Pérez fue testigo del encuentro de los blanquiazules contra el Lleida Esportiu, que va en quinta posición del Grupo. Sin embargo, no acabó como se esperaba (0-0) y los dos equipos acabaron repartiéndose los puntos.

Los alicantinos no salieron con las mismas ganas que los visitantes, un Lleida Esportiu que se jugaba los playoffs y que además contaba con el gran portero Diego Rivas. Desde el primer momento éste destacó, siendo el culpable de que los herculinos no consiguieran su tercera victoria consecutiva.

Debido al buen resultado de los partidos anteriores, Josip Visnjic decidió apostar por el mismo once. Pero a pesar de ello, los visitantes no se lo pusieron fácil y salieron fuertes para luchar por la victoria. Al volver del descanso, los herculanos fueron otros. Salieron con ganas, sin embargo no fue suficiente para batir a los leridanos. 

Al final del partido los blanquiazules tuvieron dos oportunidades clarísimas que podían haber sido definitivas para los alicantinos. En el minuto 79, Paco Candela remató de cabeza un centro de José Fran que evitó el portero rival sobre la misma línea de gol. Y en la última jugada, un zurdazo de José Fran acabó en el palo, cuando todos los aficionados pensaban que ya iban a celebrar la tercera victoria consecutiva.

 

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