El pasado sábado se vivió en el Carlos Belmonte uno de los momentos más amargos de la temporada para los aficionados del Albacete Balompié. Los manchegos tenían una oportunidad de oro para dejar prácticamente sentenciada la permanencia en La Liga 1|2|3, pero fallaron. El CF Reus fue quien aumentó sus opciones de mantenerse un año más en la categoría de plata del fútbol español.

La positiva racha que encadena el conjunto albaceteño como visitante, se está viendo afectada por lo mal que están saliendo las cosas en la ciudad manchega. Los dos últimos partidos jugados en Albacete se han resuelto con victorias visitantes, y los dos anteriores con empates.

Además, se aproximan curvas, pues los siguientes equipos a los que se enfrentarán los jugadores dirigidos por Enrique Martín son algunos de los pesos pesados de la competición, como Sporting de Gijón, Real Zaragoza o Valladolid.

Por ello el de Campanas, tras haberles dado dos días de descanso a sus pupilos, retoma la tarde del martes a las 19:00 horas los entrenamientos en la Ciudad Deportiva Andrés Iniesta. No habrá ningún día de descanso hasta al menos finalizar el choque que se disputará en el “Estadio El Molinón – Enrique Castro -Quini-”, correspondiente a la Jornada 37 del campeonato.

El partido de ida finalizó con empate a dos

Desde el miércoles hasta el sábado, el equipo entrenará todos los días a las 10:30 horas para no verse sorprendido por los de Rubén Baraja, ya que, si el Albacete no llega al partido en su mejor momento, el Sporting lo hace en todo su esplendor.

Aunque su último resultado haya sido un empate, teniendo en cuenta que tuvo lugar en el Ramón de Carranza, es un punto de oro. Los asturianos son segundos en la tabla y por lo tanto ocupan plaza de ascenso directo. La semana del Albacete Balompié tendrá que ser dura y exigente si no quieren volver a casa en estado de alerta.