Tras un cómodo, y sufrido, empate en tierras gaditanas de los jugadores de Rubén Baraja, el Sporting de Gijón piensa ya en su rival del próximo domingo en su feudo, El Molinón Enrique Castro – "Quini", donde aún, y se toca madera, no conocen la derrota en la nueva era con el nuevo míster, siendo su nueva víctima un Albacete al que solo pudieron sacarle un mísero punto en el partido de ida de LaLiga 1|2|3, quedando dos a dos.

Todo ocurrió un 26 de noviembre de 2017, el Sporting de Gijón estaba pasando por uno de los peores meses de su reciente temporada, ya que se colocaba décimo en la clasificación tras cosechar aquel empate cuando habían conseguido algo épico, remontar el tanto inicial de los locales.

Su llegada a tierras manchegas hacía saltar las alarmas en el cuadro dirigido, en aquel momento, por Paco Herrera, quien estaba haciendo un mes horroroso en la entidad asturiana y, una victoria en tal encuentro podría mejorar ligeramente sus registros en un mes invernal e infernal para la afición asturiana, ya que no era el tiempo el que no acompañaba.

Todo pudo empezar de la peor manera posible, ya que estaban viviendo un mal momento de forma puesto que acumulaban derrotas y empates y sus ánimos estaban prácticamente por los suelos, por lo que salir a jugar un encuentro fuera de su feudo era sinónimo de casi una derrota, teniendo en cuenta que los empates no ayudaban para nada por aquel entonces.

Un tanto inicial de Zozulya hacía ver que los de Paco Herrera seguían el guion de siempre, jugar a lo loco y sin cabeza. El once inicial tampoco ayudaba, ya que estaban jugadores como Borja Viguera o Pablo Pérez, quienes no estaban aportando nada al equipo en zonas ofensivas.

Tuvo que ser en la segunda parte, con la tardía entrada de Michael Santos, cuando el Sporting consiguió empatar, en el minuto 63, el encuentro y remontarlo en el minuto 70 gracias al olfato goleador del delantero charrúa. Todo se iría al traste cuando los locales empataban en el minuto 81 por culpa de la poca capacidad del equipo de evitar encerrarse en su propia área y dejar jugar a sus anchas a sus rivales.

Actualmente el Sporting cuenta con 65 puntos y está situado en la segunda posición de la clasificación, a tan solo dos puntos del líder, y su rival se encuentra decimocuarto con 46 puntos, siete por encima de los puestos de descenso.