El rey de la fortaleza blanquinegra se llama Ruano

Último derbi que se disputaba en el Estadio Nuevo Vivero de Badajoz, el llamado "derbi de la cordialidad" con mucha tensión por lo mucho que se jugaban ambos equipos pero las aficiones estuvieron unidas en la previa del partido y comentando lo que podía suceder cuando rodara la bola.

Un CD Badajoz que se la jugaba muchísimo, ya que los resultados de los partidos de la jornada no acompañaban y estaban en promoción de descenso y necesitaban los tres puntos para huir un poco del descenso y seguir luchando para permanecer en la categoría la temporada que viene. En cambio, el Extremadura UD venía con la intención de ganar los tres puntos y afianzarse en la cuarta posición, tras la derrota por la mañana del Melilla frente al Marbella.

La tensión y los nervios se palpaban sobre el césped, y también en la grada, aunque había un ambiente espectacular. Al no poder contar Juan Marrero sin Javi Rey y Javi Perez, puso un centro del campo con Rafa García y Jose Ángel mientras que el técnico visitante, Martín Vázquez, dejaba a Jairo y Candelas en el banquillo y salía con Álex Díez y Airam Benito. Comenzó el partido con una presión blanquinegra un poco mas contenida, no tan agresiva como otros partidos, debido al miedo a dejar espacios libres y que Carlos Valverde , Kike Márquez y sobretodo, Enric Gallego hiciera de las suyas pero la defensa blanquinegra con Fran Morante y Manu Torres muy atentos en las marcas, hacían imposibles las acometidas visitantes.

Sin un juego vistoso, ninguno de los dos equipos se hacía con el control del partido, aunque el conjunto pacense ponía en mayores aprietos a Manu García con las arrancadas entre líneas de Juanma García. Las pulsaciones estaban a mil. El Badajoz no estaba siendo tan intenso ni presionaba tan fuerte como suele acostumbrar en casa. Parecía esperar a un Extremadura que se sacudía del peligro sin complicaciones, muy seguro y  con un Fran Miranda siempre encontraba en balones en largo a Enric Gallego.

En el minuto 32, el conjunto visitante sufría un primer revés tras la lesión de Airam Benito y tuvo que entrar al terreno de juego Jesús Rubio. Ninguno de los dos equipos estaba cómodo sobre el césped y a base de balones aéreos por las bandas se desarrollaba el juego, donde las defensas se impusieron a los delanteros con clara contundencia y con esto se terminó una primera parte con apenas ocasiones claras para ambos equipos y con Fernando y Manu García presenciando la batalla en el medio campo.

La segunda parte, el conjunto local arrancó con mucho mas coraje y corazón porque sabían que los tres puntos eran sagrados para la permanencia, mientras los azulgranas esperaban una ocasión clara para intentar dar el zarpazo al partido con un Enric Gallego que ya tenía una amarilla desde el minuto 40 de la primera parte.El Badajoz quiso poner la sexta marcha al partido y lo consiguió tanto por banda con Ruano y Guzmán y con un colosal Jose Ángel en el centro del campo y el Nuevo Vivero hizo el resto. Los pacenses apretaron tanto con un empuje brutal que arrinconaron al Extremadura en su campo, tanto que al final, dió sus frutos cuando el rey de este equipo, Ruano, el que ya le dió el ascenso a esta categoría la temporada pasada frente al Calahorra, lanzó una diagonal por banda derecha y con un disparo seco, se coló en la portería de Manu García que nada pudo hacer y que puede certificar media permanencia y el Nuevo Vivero se caía y la grada explotó de júbilo. Minuto 66 1-0.

El Extremadura estaba noqueado y el Badajoz quería dejarlo K.O. para cerrar el partido y tres minutos después, Alex Rubio se planta sólo en un mano a mano con Manu García, que consigue adivinar la intención del delantero local y desbarata la ocasión mandando el balón a córner. El empate pudo llegar en el minuto 75 con un remate de cabeza de Álex Barrera que sale fuera por poco y posteriormente, en un centro de Álex Barrera, peinó Enric Gallego y salió el balón pegado al poste. El Nuevo Vivero se encogió. Pero en el minuto 81, fue expulsado Enric Gallego por doble amarilla por un encontronazo con Fran Morante, del que salió perdiendo el pichichi azulgrana.

Apenas dos minutos después, el conjunto visitante cometía un penalti dudoso sobre Alex Rubio, que el propio jugador tiró el penalti y lo mandó al larguero y voló al cielo de Badajoz. Oportunidad clarísima para haber podido cerrar el partido, pero en el Nuevo Vivero los partidos son casi siempre de infarto.En el minuto 88, Jairo lanzaba una falta magistralmente que Fernando despejó de puños. Se cortaba la respiración en el Nuevo Vivero. Poco después Manu Torres despejaba hacia atrás con Fernando adelantado que se marchó con mucho suspense a corner, rozando el palo de la portería del meta local. Los minutos se hacían eternos para el Badajoz, mientras que para el Extremadura, el tiempo volaba y, para rematar, el Villanovense se adelantaba en el Estadio Romano en el 93 de penalti al Mérida AD y dejaba sin la cuarta plaza a los azulgranas. 

Victoria de oficio, con coraje y corazón del CD Badajoz que respira un poco y se intenta alejar de las posiciones peligrosas de la clasificación, esta situado en la duodécima posición con 45 puntos y la semana que viene viaja a Sevilla para enfrentarse a un Betis B que necesita un milagro para poder permanecer en la categoría de bronce, por parte del Extremadura UD, deniega su posición de playoff al Villanovense (Cuarto clasificado), aunque están empatados a puntos (54), los mismos puntos que también tiene el Melilla, que es el sexto clasificado. La semana que viene tienen otro derbi, donde viajan a Mérida, en otro partido donde los dos equipos se juegan muchísimo, uno por no descender (Mérida) y otro por conseguir esa plaza de playoff para luchar por ese ascenso a la categoría de plata.