Una temporada para el olvido. Ese es el evidente sentimiento que han de tener tanto jugadores, como directivos y aficionados de la Unión Deportiva Las Palmas. Tres entrenadores incapaces de dar con la tecla para marrar la tan ansiada permanencia. La situación fue de mal en peor. Se empezó con Manolo Márquez y se acabó ahogando con Paco Jémez, previo paso de 'Paquito' como técnico interino durante algunas jornadas.

Sin embargo, siempre ha habido una figura que ha rendido fuere cual fuere el técnico sentado en el banquillo: Jonathan Calleri. Tras un gris año en Inglaterra con el West Ham, el argentino natural de Buenos Aires aterrizó en Las Palmas de Gran Canaria con el objetivo de buscarse y encontrar al delantero que maravilló en Boca Juniors São Paulo.

Fue la esperanza pío pío

Y, de puntillas, se podría decir que lo ha ido consiguiendo. De puntillas porque, a pesar de los goles anotados, su equipo no ha acompañado y ha terminado descendiendo de categoría. Eso sí, sus cifras son infinitamente mejores que con los hammers. Ocho dianas en 34 partidos, además de dar tres pases de gol. O, incluso, se le podrían añadir las tres marcadas en Copa del Rey. Por tanto, once tantos en su primera campaña en La Liga. Mientras, en las islas británicas tan solo fue capaz de ver portería en una ocasión.

De los veintitrés goles de la UD Las Palmas, ocho son de Calleri

Resulta 'casi' obvio mencionar que con esos números es el máximo anotador de la UD Las Palmas.  Después, se le acerca un Rémy que está en Getafe, el cual llegó a los cinco goles. Ya contando con los que forman de la actual plantilla canaria, es Halilović el siguiente en la lista con dos y, por último, Tana, Erik Expósito y David García con una diana. 23 goles en total. Y ocho de ellos son del mentado Calleri. Así se refrenda la vital importancia del jugador argentino durante la temporada. Ha sido él solo el que ha mantenido ese pequeño halo de esperanza de alcanzar la odisea que estaba resultando la permanencia. El fin de semana pasado rompió una sequía de siete partidos sin mojar, anotando al RCD Espanyol desde los once metros.

Calleri durante el partido de la primera vuelta frente al Getafe. / Foto: Gettyimages
Calleri durante el partido de la primera vuelta frente al Getafe. / Foto: Gettyimages

Un Calleri que se caracteriza por esa 'marca' argentina, de pura sangre. Un jugador que nunca da un balón por perdido. Su envergadura le permite bregar cada balón como si fuera el último, siendo un constante dolor de cabeza para la pareja de centrales a la que suele enfrentarse. Un pivote a lo futsal sobre el que apoyar el juego, el cual se encarga de desahogar descargando, o bien a banda, o dándosela de cara al mediapunta que llega desde atrás martilleando al rival. No hay que olvidar que muchos de sus goles han sido ante rivales de gran entidad. Por ejemplo, ha dado 'mordiscos' a Barcelona, Atlético de Madrid, Valencia en dos ocasiones, Sevilla o Real Betis.

Ya en el duelo de ida frente al Getafe fue de lo más destacado en el cuadro canario. No gozó de grandes oportunidades, pero sí que sujetó en diversas ocasiones a Djené y Cala, abriendo vías de agua para el que era su compañero, y será su rival, Loïc Rémy, quien sí erró numerosos disparos ante los azulones. Por tanto, volverá a ser una de las amenazas en la UD Las Palmas de Paco Jémez, quienes no tienen nada que perder. Por ello, será uno de los duelos más difíciles que le espera al conjunto de la capital del sur de Madrid, quienes todavía sueñan despiertos con la Europa League.

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