Siempre será recordado por ser el primer carrilero izquierdo utilizado por Pablo Machín desde que llegó en marzo de 2014. Rápido, eléctrico, desequilibrante... David Juncà estuvo cuatro años en el primer equipo del Girona hasta que en 2015 decidió cambiar de aires, rumbo a Eibar. De hecho, se le relacionó mucho con el Elche, pero el descenso administrativo del conjunto ilicitano a Segunda en 2015 hizo que el lateral de Riumors se replanteara su fichaje. Finalmente, cambió Catalunya por el País Vasco para recalar en el conjunto armero. En su primera temporada, el defensa jugó 31 partidos, pero la temporada pasada y la actual ha acumulado un total de 24 encuentros.

Este sábado, por primera vez, el 'alt-empordanès' volvía a Montilivi tras su marcha del club gerundense en 2015. Sin embargo, Mendilibar decidió no alinear a Juncà y este se quedó en el banquillo durante los 90 minutos de partido. "Esta temporada no he jugado mucho, y menos después de Navidad. Intento hacer lo que puedo, cuando salgo doy el 100%", decía tras el partido. El jugador reconoció que fue "especial" volver a Montilivi, y que incluso "estaba nervioso cuando venía con el avión".

El lateral admitió que el cambio de aires fue positivo para él "en muchos sentidos". "He notado mucho cambio. Salí con 21 años y ahora tengo 24. He mejorado mucho a nivel personal y profesional, me he convertido en un hombre", dijo el de Riumors, que contestó con un "ya se verá" a si cambiará de club al término de la temporada, dado que finaliza contrato. Eso sí, 'su' Eibar se ha convertido en la bestia negra del Girona esta temporada: "Se nos da bien. Cada partido es distinto, pero tanto en casa como aquí hemos hecho muy buenos partidos. Me hubiera gustado jugarlos", añadió.

Por último, alabó a su ex equipo: "Han hecho una temporada excelente. No esperaban hacer esta temporada en agosto, así que les he dado la enhorabuena". El Girona, con el tropiezo ante los eibarreses, dicen prácticamente adiós a sus opciones de entrar en Europa: "Hoy era su oportunidad para entrar en Europa, pero nosotros queríamos ganar y estar más arriba", concluyó Juncà.