Duelo por nada y por todo. Así se encaraba este partido en el estadio de Gran Canaria de la UD Las Palmas. Con el conjunto pío pío ya descendido, fue muy escasa la asistencia al estadio, cerca de 'casi' cinco mil espectadores se dieron cita para recibir a uno de los aspirantes -sorpresa- a alzarse con la última plaza que da acceso a la Europa League: el Getafe.
Los azulones llegaban con la presión de no poder fallar. Ganar o ganar. No quedaba otra después de que el Sevilla consiguiese su triunfo el pasado viernes. Sin embargo, la ocasión no sería nada sencilla. Con once bajas se presentaban los del sur de Madrid a este partido. Casi nada. Así, José Bordalás se vio obligado a hacer malabares -de nuevo- para formar el once. De inicio, debutaron Alberto Redondo (del Getafe B) en el lateral derecho, David Alba (Juvenil) y Barri (ya jugó ante la SD Eibar). Este último formaría en el doble pivote junto a Gaku, en una medular totalmente improvisada. Y arriba, entró la novedad de Rémy a última hora (no estaba ni convocado) por Álvaro Jiménez, quien se 'cayó' por unas molestias. Así, el francés volvía a la que fue su casa durante el primer tramo de temporada y, además, se vería las caras con Paco Jémez, el cual no le quiso para su equipo.
La Unión Deportiva, dueña de la primera parte
El guion del partido fue, quizás, el esperado. A pesar de no jugarse nada, la UD Las Palmas quiere brindar en estas últimas fechas una buena imagen para sus aficionados. Por ello, su declaración de intenciones desde el inicio fue clara. Un dominio absoluto de la posesión, haciendo prisionero al Getafe en su propio campo. Halilović fue el encargado de llevar todo el peligro de los canarios. El croata se inventó dos jugadas que finalizó con sendos disparos que terminaron siendo desviados o atajados por Guaita, dispuesto a echar de nuevo el cerrojo.
No obstante, la más clara del partido llegó tras un saque de esquina. Este le botó de nuevo Halilović, siendo rematado por Gálvez con una enorme potencia, cuyo testarazo acabó impactando 'violentamente' contra el travesaño. El propio central granadino volvió a tener una nueva intentona en la segunda mitad, la cual, esta vez con el pie, fue 'escupida' por el poste derecho. Eso sí, antes, el 'Geta' llegó al área contraria mediante algún 'fogonazo' de Amath o Ángel, pero sin poder probar a Chichizola.
Jorge Molina cambió la cara al 'Geta'
El segundo tiempo arrancó del mismo modo. Con una Unión Deportiva muy incisiva. A la mencionada clara ocasión de Gálvez, se le unió otra jugada polémica. En un envío lateral, Aquilani la intentó poner, desde el segundo palo, de nuevo al área de espuela, pero el balón chocó contra el codo de Antunes. Undiano Mallenco no vio nada punible en dicha acción.
Pero el punto de inflexión llegó a partir del minuto 62. En ese instante, entró Jorge Molina por un desaparecido Rémy. El delantero de Alcoy transformó por completo a su equipo. De repente, las piezas comenzaban a encajar y el sistema a funcionar. El Getafe comenzó a mandar y merodear con más insistencia el área de UD Las Palmas. El primer aviso llegó a través de las botas de él mismo. Una contra trenzada por Ángel, quien lanzó el cuero al corazón del área, pero el remate del '19' azulón a placer se marchó fuera. Y sin respiro alguno, esta vez el tinerfeño impactó un potente disparo contra el larguero.
Un Ángel caído del cielo
Falladas esas ocasiones, parecía que el partido ya no daría para más. Ambos equipos habían fallado lo infallable. Pero, no estaba todo dicho. En un error a la salida del balón de Javi Castellano, Gaku lo aprovechó para robarle la cartera y entregarle rápidamente el cuero a Jorge Molina. En ese tres para dos para los azulones, el veterano delantero le cedió la posesión a Ángel, quien se encontraba a su izquierda (el nipón estaba en el lado contrario y parecía la solución sencilla), el cual definió a la perfección poniéndola al primer palo, sellando el triunfo del Getafe en el minuto 88 con su 13º gol.
De ese modo, el 'Geta' consigue recuperar la 7ª plaza al situarse con 52 puntos, uno por encima del Sevilla, quien tiene todavía un partido menos. Una victoria que tiene sabor especial. La dificultad de sobreponerse a once bajas la terminaron superando con el aporte de una cantera que da sus frutos. No es casualidad que el Getafe B esté luchando por la primera posición de su grupo en Tercera. Y es que Alberto, Alba, Barri, Miguel Ángel y Merveil rindieron bastante bien. Ahora, el siguiente fin de semana les toca recibir al Atlético de Madrid. Y para soñar, hay que trabajar. Algo que en Getafe llevan a rajatabla.