Nueva derrota del filial sevillista que apura sus últimos días como equipo de Segunda División. Esta vez le tocó sufrir en Lugo para que el equipo anfitrión se llevara los tres puntos sin hacer el máximo esfuerzo pero sí fue quién más lo intentó. Tevenet, que volvió a revolucionar el once inicial, decidió hacer varios cambios con respecto a la alineación que le ganó al Alcorcón en la jornada anterior, pero el entrenador confió en los cambios que poco le sirvió para obtener algún punto.
Por su parte, el equipo gallego certificó la permanencia de forma matemática a costa de los sevillanos, pues con esta victoria el conjunto dirigido por Francisco Rodríguez obtiene 53 puntos, vuelve a instalarse en la zona media de la tabla clasificatoria y se aleja a 14 puntos de la zona de descenso, y a falta de 12 puntos por disputarse, el club gallego será de nuevo equipo de LaLiga 123 en la temporada que viene. Una buena victoria que llega tras seis jornadas consecutivas sin conseguir los tres puntos, pues los lucenses no ganaban desde mediados de marzo, es decir, hace casi dos meses.
Pocas ocasiones, un solo gol
El partido se resume en las pocas ocasiones obtenidas por ambos equipos, pero en un encuentro insulso en el que el equipo local se jugaba algo más que el visitante, el que puso más ganas fue el que se llevó el gato al agua. Francisco Rodríguez decidió realizar sólo un cambio con respecto al partido de la jornada anterior ante Osasuna. Ante el filial sevillista, el entrenador cambió el sistema al 3-5-2, dándole más presencia en el medio del campo. La única novedad ha sido la entrada de Luis Ruiz por Kravets.
Por el otro lado del bando, Tevenet, como de costumbre, realizó varios cambios con respecto al partido de la jornada anterior. Felipe Rodríguez y el joven Javier Vázquez son las principales novedades en defensa; y en el mediocentro del campo Olavide y Alonso Lara también volvieron a la titularidad. Pero la revolución de Tevenet en el mediocentro no le sirvió de mucho efecto, ya que fueron dominados por el rival, y a pesar de que ha tenido oportunidades para perforar la portería de Juan Carlos, el Sevilla Atlético no encontró el gol.
En los primeros compases del partido ambos equipos estuvieron tanteando el terreno sin gran dominio, pero fue Lara el primero para los sevillistas en tener una oportunidad de anotar pero sin éxito. Pasando el tiempo, ningunos de los equipos tuvieron oportunidades concretas para ir a por el gol, pero en medio de las pocas ocasiones, el Lugo obtuvo premio en el minuto 38 del encuentro. El delantero Escriche, de cabeza anotó el único y definitivo gol del partido, para que de esta forma, el equipo gallego se fuera por delante del marcador al descanso.
Sin reacción ni respuesta
Ante el mal partido de los suyos, Tevenet decidió realizar un doble cambio en el inicio de la primera parte dándole la oportunidad a Cantalapiedra y a Viedma por Olavide y Lara, respectivamente. Pero el cambio de jugadores no sirvió para mucho más que no encajar más goles en el partido, ya que la capacidad goleadora, como en toda la temporada, fue casi nula. Pero en medio de la poca capacidad de reacción, los sevillistas tuvieron una gran oportunidad para marcar en el minuto 58 cuando Aitor Cantalapiedra envió un balón al larguero tras un saque de esquina directo, pero la mala suerte del filial dictaminó que ese balón no entrara.
Al final, el encuentro acabó en una nueva derrota del filial sevillista y el naufragio sigue en su auge tras un triste partido en el que los de Tevenet tan sólo remató cuatro veces y sólo uno iba a puerta. Así pues, con 26 puntos el Sevilla Atlético sigue siendo el colista de LaLiga 123 ante un Lugo que ya ha certificado la permanencia de forma matemática. Es decir, el conjunto gallego firmará su séptima campaña en la categoría de plata.