El Sevilla es muy diferente al de la primera vuelta, el equipo ha cambiado desde entonces por dos veces de entrenador, primero se echó al “Toto” Berizzo para contratar a Montella, y es que el argentino no terminaba de convencer ni por juego ni por resultados, además de que su enfermedad hacía muy difícil que pudiese estar en muchos de los entrenamientos. Con la llegada del técnico italiano, el club buscaba dar un golpe sobre la mesa y lograr que el equipo volviera a competir, sobre todo en las grandes citas. Sin embargo, aunque el equipo notó cierta mejoría en algunos puntos, ha acabado haciendo el ridículo en muchas ocasiones, sobre todo en defensa, pues son muchos los partidos en los que los andaluces han recibido más de cinco goles, sin ir más lejos en el partido de ida en el Santiago Bernabéu, el Real Madrid se fue al descanso con un marcador de 5-0 a favor, tras firmar una gran primera parte, pero también conviene decir que los minutos del Sevilla no fueron los mejores que se pueden tener en un terreno de juego, dejando muchos espacios a los atacantes blancos.
Caparrós la esperanza del sevillismo
La llegada de Caparrós al banquillo del Sevilla para estos cuatro partidos (ahora ya tres), ha supuesto un cambio en la mentalidad del equipo que se pudo ver el otro día en el encuentro frente a la Real Sociedad, además el técnico apostó por darle mucho peso en el juego del equipo a Roque Mesa, el exjugador de Las Palmas y del Swansea, apenas había contado para Montella, pero Caparrós decidió alinearlo junto con N´zonzi en el centro del campo dándole a este y a Bánega el control ofensivo del equipo, para que el argentino no se encuentre de esta manera tan sólo en el apartado de crear juego. Además de también apostar por Sandro como delantero centro.
El problema de que un entrenador lleve tan poco tiempo al mando de un equipo es que es difícil sacar conclusiones, sólo lleva una semana al mando del equipo y tan solo un partido dirigiendo a los hispalenses, aun así Zidane ya ha dado una de las claves de los equipos de Caparrós, el francés sabe que los equipos del de Utrera suelen presionar muy arriba desde el primer minuto, de hecho, esa es la clave de la victoria frente a la Real Sociedad, para Zidane el Sevilla ahogó al equipo vasco y fue lo que acabó provocando la derrota.
Es difícil establecer un sistema de juego, aunque basándonos en lo visto el fin de semana pasado, todo apunta a un 4-5-1, con N´zonzi y Roque Mesa dando salida de balón, Banega como mediapunta y Correa y Franco Vázquez tirados en banda, aunque a lo mejor el poco tiempo de descanso y el derbi hacen pensar en posibles rotaciones, aunque hasta mañana no se podrá saber la verdad, o quizá decide por reforzar el apartado defensivo, pues el ataque del Real Madrid es demoledor, el problema es que tras el clásico del domingo, la consecuencia es la baja de Cristiano Ronaldo por lesión pensando en la final de Kiev, aun así, Asensio, Lucas Vázquez, Benzema, Bale o incluso Isco si finalmente reaparece pueden ser motivos más que de sobra para seguir preocupándose.
Bánega, el jugador clave
Bánega será el principal dolor de cabeza para los madridistas, el argentino está siendo la clave del juego del Sevilla durante toda la temporada, y está en un gran momento de forma, marcó el gol de la victoria la jornada anterior y es la gran esperanza de los sevillistas para lograr la clasificación a competiciones europeas para la temporada siguiente.