Espectacular, extraordinario, histórico, inolvidable, sobresaliente. Todos los adjetivos se quedan cortos para describir la temporada completada por el Sporting B. El equipo dirigido por José Alberto, recién ascendido a la categoría de bronce del fútbol español, ha superado todos los pronósticos y competirá durante las próximas semanas por el ascenso a Segunda División, una categoría en la que nunca ha militado el filial rojiblanco.

Todo gran sueño comienza con un gran soñador y en cuanto terminó la primera vuelta del campeonato con el Sporting B en segunda posición, a tan solo cuatro puntos del Mirandés, el sueño parecía ir por buen camino y estar cada vez más próximo a la realidad. No obstante, no hay que olvidar que hace poco más de un año el filial sportinguista estaba luchando para dejar atrás la Tercera División y el principal objetivo para el año presente era única y exclusivamente sellar la permanencia, una meta que el Sporting B ya había alcanzado en el mes de febrero.

Con una agónica victoria ante el Arenas de Getxo en El Molinón Enrique Castro ‘Quini’, ‘Los guajes’ de José Alberto han puesto el punto y seguido a una temporada en la que la historia se ha convertido en su mayor aliada. Las cifras no mienten. Con 75 puntos bajo el brazo, el cuadro de Mareo ha superado el tope histórico de puntuación en la categoría por parte de un filial rojiblanco, cifrado en 71 puntos en la temporada 95/96 con Miguel Montes en el banquillo.

“Hay que estar muy orgullosos de estos chavales y debemos darle valor a todo lo que están haciendo”. Este ha sido el discurso de José Alberto durante todas las semanas de competición, un entrenador ‘de la casa’ que ha configurado un grupo que solo ha perdido siete partidos en toda la liga. Tal ha sido el nivel mostrado por el conjunto gijonés que, con sus 75 puntos, se ha convertido en el segundo mejor equipo de los 80 conjuntos que conforman la Segunda División B, tan solo por detrás del Mirandés. Por tanto, con esta puntuación el Sporting B habría sido campeón en todos los demás grupos.

Los goles de Claudio Medina o Isma Cerro, las asistencias de Cayarga o las paradas de Dani Martín. La joven plantilla rojiblanca, con José Alberto a la cabeza, ha completado una temporada histórica y está a dos eliminatorias de plantarse en Segunda División. Su primera piedra en el camino será la U.E. Cornellá. No obstante, en las notas finales del Sporting B ya aparece reflejado un sobresaliente y el sueño ya se ha hecho realidad. Como decía Machado: "Tras el vivir y el soñar, está lo que más importa: despertar y disfrutar".