¿Quién dijo que fuera a ser fácil? ¿Quién dijo que con el punto de Alcorcón la salvación estaba garantizada? ¿Quién dijo que los equipos de arriba ganarían con soltura a los de abajo? A falta de tres jornadas para el final del campeonato liguero la igualdad es máxima, tanto en la parte alta de la clasificación como en la lucha por evitar el descenso, y más después de lo sucedido en la última jornada disputada.

Y es que en esta trigésimo novena jornada se han disputado una serie de encuentros entre equipos muy dispares en la clasificación, unos luchando por ascender de forma directa o a través de playoff y otros que intentan sumar puntos para alejarse de los puestos que condenan al infierno de Segunda B de cara a la próxima temporada.

La primera de las sorpresas llegó el viernes

Un Lorca que ya no se jugaba nada desde hace unas cuantas jornadas, sorprendió al Numancia en el Francisco Artés Carrasco y ganó por 2-1 en un partido mucho más disputado de lo que se esperaba.

El sábado comenzó con otra sorpresa en Gijón

Parecía una tarde cómoda en El Molinón–Enrique Castro Quini para presenciar una victoria de su equipo, el cual llevaba diez partidos consecutivos logrando los tres puntos en casa, frente a un Barcelona “B” cada vez más desahuciado en la clasificación y con una racha de diez partidos sin conocer la victoria.

Pese a los datos, las estadísticas están para romperlas y los visitantes sorprendieron a los asturianos con un resultado final de 2-3. El filial sigue en descenso pero cada vez contempla más de cerca el milagro de la salvación.

Pero lo del domingo…

Y es que la jornada dominical comenzó con el encuentro que enfrentaba a la Cultural Leonesa y al Lugo. Los locales inmersos en la lucha por la permanencia se adelantaban en el marcador con un gol de David García de cabeza, pero el equipo lucense empataba tras un penalti errado por Cristian Herrera, quien aprovechaba el rechace del portero culturalista.

Un empate amargo en el Reino de León, que podía haberse dado por bueno a orillas del Bernesga siempre y cuando el Córdoba hubiera caído en Vallecas, cosa que no sucedió, ya que remontó el gol inicial de Raúl de Tomás y sorprendentemente sacó los tres puntos en casa del líder. Con esta victoria, el equipo andaluz aprieta aún más la clasificación pese a no salir aún de los “puestos rojos”.

Otro equipo que sumó en positivo fue el Alcorcón, equipo que igualó ante la Cultural Leonesa el pasado fin de semana en el Municipal de Santo Domingo. En esta ocasión, el punto supo mejor para los alfareros, ya que lograron empatar en uno de los estadios más complicados de la Categoría de Plata como es El Alcoraz. Los amarillos se adelantaron en el marcador con un tanto de Nono, mientras que Gonzalo Melero fue el autor del gol local.

La jornada de sorpresas no acabó ahí. En el Estadio de los Juegos Mediterráneos se enfrentaban Almería y Granada, dos equipos obligados a ganar para seguir confiando en sus objetivos. El caso es que volvía a saltar la sorpresa y eran los locales quienes se hacían con los tres puntos ante un Granada que se despedía definitivamente del sueño de lograr el ascenso. Sin embargo, los locales salían muy reforzados tras esta victoria, ya que en la próxima jornada vivirán un encuentro vital en El Nuevo Arcángel ante el Córdoba.

El peor parado de esta jornada fue el Nástic, próximo rival de la Cultural

Sin lugar a dudas, el Nástic de Tarragona fue el gran perjudicado. Cayó en Sevilla ante un filial hispalense ya descendido y sin nada en juego por 1-0 con un gol del internacional español sub-17 José Lara. De esta manera, el próximo encuentro de los granas se convierte en otra finalísima, en la que se enfrentará a la Cultural Leonesa en el Nou Estadi.

La clasificación quedaría muy apretada por abajo y quedan tres jornadas para el final

Con todas las sorpresas que se han dado esta jornada, otro equipo que cae implicado en la lucha por la permanencia es el Albacete Balompié (47 puntos), quien ya parecía salvado. Le sigue el Almería con 46 y Cultural y Alcorcón con 45. El Nástic de Tarragona con 43 marca la salvación, mientras que en descenso aún se encuentran el Córdoba y el Barcelona “B” con 42 y 40, respectivamente, pero con la moral por las nubes y afrontando sus próximos encuentros como locales.

Quedan tres partidos, nueve puntos en juego y muchos duelos directos. La permanencia se va a pagar muy cara y cada partido será una final más. Nadie quiere descender.

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