A pesar de no jugarse nada ninguno de los dos conjuntos, la visita del Espanyol al feudo del Athletic se auguraba complicada. Con un Athletic en una temporada bastante similar a la perica, era de suponer que los leones salieran a La Catedral a regalarles a sus aficionados una victoria de despedida. Pero no fue así. El Espanyol salió victorioso de San Mamés, cosa que no ocurría desde la temporada 13-14 cuando los pericos, dirigidos por Javier Aguirre, se convertían en el primer equipo en ganar en este Nuevo San Mamés en Liga.  

Con Gallego todo funciona mejor 

A pesar de que el principal dominador del partido fue el Athletic, el Espanyol aprovechó bien sus oportunidades y se supo defender exquisitamente bien de las acometidas de los leones. El gol llegó en un saque de esquina botado por Piatti que era rematado por David López totalmente solo y sin marca. Tanto Gerard como Naldo tiraron genial de los marcadores y el central entró como si estuviera en su casa y acribilló con un potente cabezazo a Kepa que solo pudo mirar con resignación la empanada de su defensa. 

A partir de ahí, el Athletic, aunque sin muchas ideas, lo único que consiguió fue chocarse una y otra vez contra el muro defensivo del Espanyol. El ataque comandado por Williams y Muniain no pudo hacer nada por profanar la portería de Diego López. Los extremos rojiblancos fueron los que más empeño pusieron de su equipo, que parecía condenado a dejar pasar los minutos para que la temporada terminara cuanto antes. 

En la segunda parte, el Espanyol espabiló e intentó aprovechar la flojera y la parsimonia que presentó el conjunto de Ziganda durante los noventa minutos. Las carreras de Baptistao dejaban atrás fácilmente a los centrales del equipo bilbaíno, pero o bien sus dejadas a Gerard y Sergio García no eran muy ortodoxas o los delanteros no terminaban de acertar con sus disparos. 

Pasaba el tiempo y el Athletic decidió intentar el empate a la desesperada mediante centros que buscaban la cabeza de Aduriz y a punto estuvo de conseguirlo el ariete de San Sebastián en un centro de Muniain en el que Diego López sale mal, pero llega a tocar el balón, lo que le hizo fallar en su remate final al delantero rojiblanco. 

Ante los ataques de los locales, el Espanyol intentaba salir a la contra con la velocidad de Piatti y Baptistao pudiendo haber conseguido aumentar la ventaja en dos ocasiones. Primero, en una dejada de Gerard al punto de penalti donde Melendo, completamente solo, tira, pero su chut se encuentra con una espectacular estirada de Kepa y, en los minutos finales, Baptistao le ganó la posición a Córdoba y el carrilero tocó ligeramente por detrás al delantero brasileño, pero no lo suficiente como para considerarlo pena máxima. 

Finalmente, los minutos siguieron pasando y el Espanyol decidió mantener la posesión del balón y el dominio del partido. Ante la pasividad de los suyos, La Catedral respondió con una gran pitada durante los minutos finales y al final del partido. Con estos tres puntos, el Espanyol será 11º y terminará una decepcionante temporada que empezó con la ilusión de volver a Europa. 

Partido de despedidas 

El partido de hoy en la capital vizcaína estaba predestinado a las despedidas. Con este partido, se despedían tanto Athletic como Espanyol de su mediocre temporada. También, salvo sorpresa, dicen adiós a sus banquillos tanto "Cuco" Ziganda como David Gallego. El primero, no ha sabido darle ni el juego ni la intensidad que siempre transmiten los partidos del Athletic que, sumado al desastre en la clasificación, han hecho que el club le busque ya un sustituto.

En cuanto a Gallego, el club no quiere apostar por su continuidad y quiere que vuelva a trabajar con el filial pero desde el vestuario el mensaje es claro. Cinco partidos con Gallego, cuatro victorias y un empate. Quizás sería el momento para darle la oportunidad. Además, esta victoria ha supuesto la tercera consecutiva, cosa que no se había conseguido en toda la temporada. 

También se despedía hoy del fútbol profesional el árbitro David Fernández Borbalán. El colegiado andaluz decía hoy adiós tras catorce años en la Primera División española y ocho años siendo arbitro FIFA. El propio colegiado reconoció que pidió que fuera San Mamés el último estadio donde pitaría y así ha sido. 

Por último, este también puede haber sido el último partido de dos jugadores pericos. Todo parece indicar que tanto Gerard como Aarón comenzarán la temporada que viene lejos del RCDE Stadium, el primero recalará en el Villarreal por unos 20 millones de euros y el segundo en el SL Benfica por 10 millones de euros y la posibilidad de sumar la cesión de algún jugador del club lisboeta. También parece indicar que abandonarán la disciplina perica los cedidos Sergio Sánchez y "La Roca" Sánchez, ya que el club no tiene intención en que continúen así como Jairo, que acaba contrato y no hay intención de renovarle.