El Rayo Vallecano tiró por la borda la primera ocasión para volver a Primera División. El escenario no era ni mucho menos sencillo, ya que la visita a un Alcorcón ansiado de puntos para evitar su descenso a la Segunda B se antojaba complicada. El equipo alfarero salió desde el primer minuto a comerse a su rival y así lo demostró con un demoledor 4-0 noventa minutos después. Álvaro Peña, Toribio, Mateo García y Álvaro firmaron los tantos de los locales, que no concedieron ni una sola oportunidad al equipo visitante. Raúl de Tomás falló un penalti que podría haber supuesto el empate antes del descanso.

La impredecible, a la par que apasionante Segunda División, ha deparado un final de temporada de lo más vistoso. Después de una segunda vuelta del Sporting de Gijón casi inmaculada, donde llegaron a estar durante diez partidos seguidos sumando de tres en tres, el equipo asturiano dirigido por el ex rayista Rubén Baraja ha encadenado tres derrotas seguidas que le despiden prácticamente de conseguir el ascenso por la vía rápida. Un Huesca dubitativo que no ha podido continuar su impresionante racha de la primera vuelta también ha cedido muchos puntos.

Sin embargo, el Rayo Vallecano -apoyado por una enorme masa de aficionados hoy en Santo Domingo- ha sumado su segunda derrota consecutiva esta temporada contra todo pronóstico. Dos derrotas que, de paso, han puesto la lucha por el descenso a Segunda B al rojo vivo y de la cual el Alcorcón dice adiós al quedarse a un paso de la permanencia. Así las cosas, el equipo de Míchel -que mañana puede perder el liderato si el Huesca vence al Lugo, lo que le daría el primer ascenso a la élite de su historia- tendrá el próximo domingo la segunda oportunidad para volver a Primera dos años después. El rival, el Lugo, que podría ver dos ascensos seguidos de sus rivales.