Pese a adelantarse en el marcador y contar con un hombre más durante más de setenta minutos, el Betis fue superado por el Leganés y se quedó sin la quinta plaza. Joel Campbell adelantó a los verdiblancos y poco después Siovas firmaría la igualada. En el segundo tiempo, José Naranjo le daría la vuelta al marcador. Tonny Sanabria devolvería las tablas y, cuatro minutos después, Amrabat conseguía el 3-2 definitivo.

Joel Campbell, el mejor del partido

El costarricense fue de lo poco salvable del cuadro verdiblanco en la tarde del sábado. Y es que casi todo el peligro partió de sus botas. A los 20 minutos de partido, tras una excepcional galopada de 50 metros se plantó solo ante Serantes y ponía el 0-1 en el marcador. Era su segundo gol en la presente temporada, después del que lograse ante el Valencia el día en el que ‘redebutaba’ como jugador del Betis.

Ya en la segunda parte, también intervino en el tanto de Tonny Sanabria, pues suyo fue el centro que, si bien fue en primera estancia repelido por la zaga pepinera, acabaría en la testa del jugador paraguayo, que no perdonaría.

Con actuaciones como la de Butarque, no cabe duda de lo mucho que habría aportado el tico en caso de haber estado disponible para Quique Setién durante la mayor parte de la temporada. La lesión, que le ha tenido fuera desde agosto hasta octubre y desde noviembre hasta abril, ha impedido que desarrollase todo su potencial, aunque si bien es cierto que cuando ha estado sobre el césped ha solido rendir óptimamente.

Su continuidad está en el aire. En principio deberá volver al Arsenal como consecuencia de que su cesión al Betis termina este mes de junio, pero queda ver si desde la planta noble del Benito Villamarín se busca prolongar el préstamo una temporada más.

Rubén Castro se queda sin lograr el único récord que le faltaba

Hombre de referencia en ataque del Betis en las siete campañas anteriores, el grancanario volvía a la capital andaluza en enero tras seis meses cedido en el Guizhou Hengfeng Zhicheng con el objetivo de erigirse como el máximo goleador de la historia del cuadro helipolitano en Primera División. Para igualar la marca de Poli Rincón tenía que hacer tan solo dos goles y en el día en que volvía no pudieron empezar mejor las cosas para él. Fue precisamente en el partido de la primera vuelta ante el Leganés y su diana valía para dar los tres puntos a su equipo, que se imponía por 3-2 a los blanquiazules.

Luego no ha tenido demasiadas oportunidades para batir la única marca que le quedaba y ante el cuadro pepinero no mostró su mejor versión de cara a puerta. Rubén Castro no dispuso de ninguna ocasión para conseguir ese tan ansiado gol, aunque sí estuvo preciso para asistir a Campbell en el primer gol del encuentro.

Pese a que por contrato podría continuar, todo indica que la salida del jugador más determinante de la historia del club de las Trece Barras es inminente. Una pena que no haya podido disfrutar de este Betis tan próspero que parece avecinarse cuando le ha sacado las castañas del fuego muchas veces en muy delicadas situaciones en las que la alegría no imperaba en el feudo verdiblanco.

Los fallos en defensa y la falta de intensidad, claves

Cuando el Betis se puso ganando en Butarque y Diego Rico fue expulsado muy pocos podrían imaginar lo que pasaría pocos después. Se le había puesto el choque completamente de cara cuando solo se llevaban 23 minutos de juego disputados.

Pero lejos de sacarle partido a ello, haría todo lo contrario. En el minuto 27, los pepineros lograrían la igualada en una jugada a balón parado. Mandi no estuvo acertado a despejar y Siovas lo aprovechó de la mejor manera para devolver el empate al electrónico.

Ya en la segunda parte, un pelotazo en largo desde la defensa blanquiazul derivaría en el 2-1. Jordi Amat, que tras firmar un arranque de curso muy irregular se había asentado en el once con buenas actuaciones, no supo despejar ese balón cuando lo tenía todo a su favor y Guerrero se benefició de su torpeza para plantarse solo ante Pedro y servirle el gol en bandeja a José Naranjo.

El Betis igualó el partido y cuatro minutos después encajaba el tercero. Si bien Amrabat marca con cierta fortuna al tocar su disparo en Rafa Navarro y despistar a Pedro, el equipo no se mostró lo suficientemente expeditivo para cortar una jugada que nació de un saque de banda sin aparente peligro.

Hacía mucho que el Betis no mostraba esa fragilidad defensiva. Los problemas en la zaga parecían haber quedado enterrados tras la derrota ante el Real Madrid y la serie de seis encuentros consecutivos sin recibir goles.

Eso, sumado a la poca intensidad que mostró en la mayoría de fases del encuentro, impidió al Betis coronar un curso de la mejor forma posible. La sexta posición es muy positiva, pero de ganar incluso podrían haber obtenido un botín mucho mayor traducido en un quinto puesto y en una mayor recompensa económica que habría venido de perlas para encarar el mercado estival.