Habría que inventar una palabra que fuera una mezcla entre rara y difícil para poder definir la temporada del Athletic Club. Pero no cabe duda de que la “Era Ziganda” ha sido pésima y decepcionante a nivel deportivo. Tras unos años bastante buenos con Ernesto Valverde que concluyeron con la salida del técnico dirección Barcelona, los altos mandatarios apostaron por una nueva etapa continuista. Para ello el elegido fue José Ángel “Kuko” Ziganda, técnico del filial por aquel entonces. Pero el tiempo acabo dando la razón a aquellos que dudaron de la elección del nuevo míster y creyeron que no era la mejor opción. Eliminado a las primeras de cambio en la Copa del Rey, decimosexto en La Liga y eliminado despiadadamente de la Europa League, ha sido el balance de la campaña.

Pero a pesar de la paupérrima temporada realizada, podemos sacar algunas conclusiones positivas. Realmente no son muchos los brotes verdes que podemos encontrar de esta temporada, pero uno de ellos destaca por encima de todos. Y ese “brote” tiene nombre propio, Kepa Arrizabalaga.

Sin duda lo más positivo de esta temporada a nivel deportivo, junto con el regreso de Yeray Álvarez a los terrenos de juego tras sus graves problemas de salud, es la consagración de Kepa como estrella bajo los tres palos. Durante la temporada 2016-2017 ya se pudo evidenciar de forma clara el potencial de este jugador. Fue una temporada de aprendizaje, donde gracias a la buena mano de Valverde el portero vivió un proceso de “transición dulce” con su antecesor Gorka Iraizoz, todo un emblema en el club. Kepa fue poco a poco ganando protagonismo, ganando experiencia y haciendo ver a la entidad, que hay había un portero de nivel para muchos años.

Tras la marcha del club de Gorka Iraizoz, Ziganda depositó toda su confianza en Kepa para ser el portero titular del Athletic Club esta temporada, y este le corroboró con creces. Ziganda apostó por la fórmula de que su primer portero jugará La Liga, y el segundo la Copa del Rey y la Europa League. 38 partidos de una de las mejores ligas del mundo, es el reto que debía afrontar el portero de Ondárroa.

A la conclusión de la misma dejando a un lado las estadísticas y haciendo una primera valoración general, la temporada del portero Vizcaíno ha sido casi de diez.  Ante una evidente fragilidad defensiva de este equipo, el guardameta sacó pecho, realizando grandes actuaciones en campos difíciles y contra rivales de mucha entidad, con paradas salvadoras que han dado gran parte de los puntos que el Athletic ha podido cosechar esta temporada y con otras que no han servido para lograr puntos, pero si para que “los leones” tuvieran esperanzas y posibilidades hasta el último minuto de partido de conseguirlos. Este joven guardameta de tan solo 23 años, en su primera temporada como titular en una de las porterías más exigentes de este país, ha conseguido mantener gracias a paradas casi milagrosas a todo un Athletic Club dentro de partidos en los que el equipo estaba más afuera que dentro.

Yéndonos a la estadísticas el guardameta vasco ha disputado 30 partidos de la pasada liga, el resto no disputados por lesión, dejando un balance de 43 goles en contra, 1.43 de media de por partido. Además promedia 3.3 paradas por encuentro, gracias a un total de 99. Su buen juego de pies queda evidente cuando hablamos de una media  de 19.63 pases buenos por partidos, un total de  589 en esta liga. Analizando en profundidad estos datos, no parecen cifras muy espectaculares, pero si tenemos en cuenta las estadísticas y el juego desplegado globalmente por el equipo, la fragilidad defensiva del mismo, su inexperiencia al más alto nivel y las diferentes situaciones de dificultad que ha vivido esta temporada, las estadísticas dejan de ser del todo fiables para valorar la temporada de Kepa Arrizabalaga.

“La cabeza bien amueblada”

A pesar de su juventud el guardameta siempre ha mantenido los pies en la tierra. Conscientes de su calidad y su bajo precio en el mercado y de que próximamente acababa contrato, los grandes clubes europeos se fijaron en el para su incorporación esa misma temporada o la siguiente.  Y uno de ellos fue el Real Madrid, con su actual portero Keylor Navas y su segundo Kiko Casilla, los cuales debido al bajo rendimiento del equipo en esta pasada liga estuvieron muy cuestionados. La prensa se hizo eco de la situación y desde la propia directiva del club, se llegó a tantear el entorno del jugador. Tal fue la situación, que la prensa deportiva española llego a afirmar que el jugador había aprovechado el tiempo que estuvo lesionado (motivo por el cual no ha jugado más partidos esta temporada) para viajar a Madrid y pasar el pertinente reconocimiento médico que le llevaría posteriormente a fichar por el club de Chamartín. Cada rueda de prensa en Valdebebas por aquella época y las portadas de los principales diarios deportivos del país estaban destinadas para Kepa. Cuando todo parecía escrito, apareció el entrenador del Real Madrid, Zinadine Zidane, para apoyar a sus actuales porteros y parar “la maquinaria” que estaba llevando a cabo la contratación del actual portero del Athletic. Se llegó a hablar incluso de cifras y finalmente las cifras que se oficializaron, son las de su prolongación de contrato con el Athletic, que acababa este mismo verano, hasta 2025 con una subida de clausula hasta los 80 millones, por lo que parece que salvo sorpresa será jugador del “rojiblanco” para rato.

La presión de la prensa y un posible fichaje por el Real Madrid podría desestabilizar a la mayoría de jugadores jóvenes, pero no a Kepa. Además a esto le sumamos las grandes actuaciones que cuajo Iago Herrerín, segundo portero, durante la lesión que sufrió Arrizabalaga que le mantuvo apartado numerosos partidos. Todo esto parecía que podía desestabilizar y cortar la progresión del joven portero vasco, pero nada fue así. Ziganda tras recuperarle, volvió a darle la confianza y la titularidad, y este le correspondió otra vez con creces como si nada de todo esto hubiera pasado. Esto habla muy bien de la profesionalidad de este guardameta, lo centrado que está en su carrera deportiva y  “la cabeza bien amueblada” que tiene.

Kepa estará en Rusia

Si quedan dudas de la calidad y del presente y futuro de este jugador, el seleccionador Julen Lopetegui tapa cualquiera de ellas. Consciente de esto y de la gran temporada realizada, el técnico ha decidido premiarla con la reciente convocatoria del jugador “león”. Un Kepa que a priori parte como segundo portero de la selección española, por detrás de David De Gea, pero que tiene posibilidades de disputar algún minuto este Mundial. Gran noticia para toda la familia “rojiblanca” del Athletic y para el propio jugador y su entorno, el ver la recompensa de estar entre los 23 seleccionados por Julen para poder conseguir de nuevo el título para España de Campeones del Mundo.  Sin duda, esta llamada de “La Roja” es otra buena prueba del “temporadón” en mayúsculas de Kepa Arrizabalaga  y  un reconocimiento al esfuerzo y calidad.