La historia del Rayo Vallecano empezó a tener otro color cuando el humilde equipo de barrio aterrizó en la máxima categoría del fútbol español. La primera vez que irrumpió entre los grandes fue en la temporada 1976-1977, de la mano de Francisco Javier García-Verdugo. Junto a ellos ascendieron Cádiz y Sporting.

García-Verdugo, el primero en derribar la puerta

El talaverano fue el primero en derribar todos aquellos impedimentos que hay que superar para lograr un ascenso, algo que después han repetido varios entrenadores. Pero el primer encargado de inundar de ilusión a la parroquia franjirroja, en el aniversario de su muerte -nueve de junio- tendrá una calle dedicada a él en Talavera. Así lo ha confirmado Libre Directo Talavera.

Pero el legado que García-Verdugo dejó en el fútbol no sólo se limita al Rayo, también como jugador dejó huella en Logroñés, Zaragoza, Xerez, Cádiz, Valladolid, Valencia, Sabadell y Deportivo, tal y como ha recopilado AS. El que en su momento ejercía como defensa llegó a disputar cinco temporadas en la élite participando en 88 partidos. Una lesión en el glúteo tras una chilena, impidió su participación en el Mundial de Inglaterra de 1966 para el que estaba preseleccionado. En los banquillos, además de lograr el ascenso con el Rayo, también dirigió al Tenerife, Córdoba, Nàstic, Osasuna y Deportivo. Pero destacó enormemente mientras estuvo en el Zaragoza ejerciendo de segundo de Beenhakker en los 80.

Jugadores del Rayo Vallecano celebrando un gol | Fotografía: La Liga
Jugadores del Rayo Vallecano celebrando un gol | Fotografía: La Liga

Este aniversario que se cumplirá el mes de junio cobra mayor importancia viendo lo que Míchel y sus hombres pueden lograr en muy pocos días. La gesta puede llevarse a cabo si logran al menos un punto ante el Lugo en el Estadio de Vallecas. Si lo consiguen, al igual que consagró el Huesca el lunes -también contra los gallegos-, el Rayo Vallecano volverá a ser de Primera División, significando el séptimo ascenso del conjunto de la franja.