Nada tiene que ver el equipo que visita este domingo el estadio Ramón de Carranza si lo comparamos con el de la primera vuelta. Pese a estar prácticamente descartado para jugar playoffs salvo sorpresa y carambola casi imposible, el Tenerife llega a Cádiz dispuesto a dar guerra las últimas jornadas de liga.
Cambios respecto a la primera vuelta
Muchos cambios significativos en el equipo tinerfeño en comparación al que cerró el año 2017 ante el Cádiz en el Heliodoro Rodríguez López. Para empezar, Martí ocupaba el banquillo insular. El Tenerife no pasaba por un buen momento de forma y varias jornadas después, muy lejos del playoffs, el preparador balear fue sustituido por Joseba Etxeberría. Pese a la inexperiencia del entrenador vasco en un banquillo profesional, Etxeberría cambió radicalmente la imagen del equipo y ha conseguido grandes resultados, como la victoria conseguida en la última jornada ante el Sporting de Gijón en casa.
Este cambio, unido a la llegada de fichajes que están rindiendo a un nivel sobresaliente como Álex Mula, cedido por el Málaga, y Luis Milla, llegado del Fuenlabrada, han conseguido que el Tenerife vuelva a ser un equipo competitivo y llegue a las últimas jornada con una mínima posibilidad de jugar playoffs.
Antecedentes
Cuatro emocionantes duelos nos dejaron ambos equipos la temporada pasada, además del partido de la primera vuelta. Un empate, una victoria cadista y dos victorias tinerfeñas fue el balance de los duelos entre ambos equipos la temporada pasada, dos de ellos en una primera eliminatoria de playoffs a Primera División que se llevó el equipo entrenado por aquel momento por José Luis Martí por la mejor clasificación del equipo insular.
En cambio, en el duelo de esta temporada en el Heliodoro, el equipo cadista fue muy superior al equipo local y controló el juego del partido gracias al gol en el minuto 20 obra de Jon Ander Garrido. Pese a eso, un tanto del ex cadista Juan Villar en los últimos instantes de partido empataba la contienda y repartía los puntos entre ambos equipos.