Las lenguas sabias del fútbol siempre dicen que, si tienes un buen portero y un buen delantero, tienes mucho ganado, que es algo fundamental en un equipo de este deporte. Primer año desde el descenso en el que se ha dado esta combinación en el Real Zaragoza, éxito rotundo hasta el momento. Cristian Álvarez volvió a ser determinante ante el Valladolid, con su seguridad bajo palos y fuera de ellos y con alguna intervención preciosa. Borja Iglesias, más de lo mismo.
El ariete gallego ha sido elegido por los seguidores de VAVEL Zaragoza como el mejor jugador del partido de la jornada 41 frente al Valladolid. En la habitual encuesta realizada a través de Twitter, Borja recibió el 70% de los votos. Y es que, una vez más, volvió a ser tan importante como decisivo para lograr el pase al playoff. El delantero zaragocista ya alcanza los 22 goles en la competición liguera.
Lo más destacado sin duda es su primer hat-trick con la elástica del león, pero no solo destacó por eso. Borja Iglesias dio otra clase más de delantero top, cubriendo todo balón que pasaba por sus alrededores, tirando desmarques como en el primer gol, bajando a recibir a tres cuartos de campo, presionando y no dando por perdido ningún balón... Aunque no metiera goles, seguiría siendo muy importante para el equipo, lo que ya se ha demostrado en anteriores partidos como el del Albacete, el más reciente.
Los otros jugadores que también fueron votados en la encuesta son Cristian, Verdasca (14% para ambos) y Lasure (2%). Como ya se ha dicho antes, el coloso argentino fue fundamental con sus intervenciones, además demostrando calidad humana -algo que desprende a raudales- al no perder tanto tiempo como habrían hecho otros guardametas en algunas ocasiones del encuentro.
Mientras, el central portugués realizó un partido sobresaliente en concentración, anticipación y juego aéreo, aparte de producir ofensivamente al provocar el segundo penalti. Por último, Lasure se mantuvo en su línea de simplicidad y corrección, dando una salida de balón inmejorable y leyendo a la perfección difíciles situaciones de partido.