El Celta de Vigo ha llevado a cabo una temporada irregular acabando en la posición décimo tercera de la tabla. 49 son los puntos que el equipo celeste ha conseguido. Anotando un total de 59 goles a favor y recibiendo 60 goles en contra. De los 38 partidos disputados, el Celta ha logrado ganar menos partidos de los que ha perdido. Un total de 15 partidos perdidos, diez empates y trece victorias. Esto explica la irregularidad en el campeonato liguero del conjunto celeste. 

En comparación con la temporada pasada, el Celta ha quedado en la misma posición pero ha mejorado en cuanto a puntos. La temporada pasada acabó con tres puntos menos en el mismo puesto que esta. 45 fueron los puntos obtenidos. El conjunto de Unzué ha mejorado en portería ya que la temporada pasada le encajaron 65 goles anotando ellos 56 goles. El objetivo del club esta temporada era entrar en puestos de Champions. Este objetivo ha quedado lejos de su alcance. Once puntos son los que a los celestes les ha faltado para acceder a estos puestos. El Celta tiene que estar en Europa y la próxima temporada luchará por ello. 

Este objetivo fue marcado a principio de temporada cuando era posible acceder a él. No son muchos los momentos buenos que el conjunto de Unzué ha pasado. Pero el equipo funcionaba mejor antes de acabar el año 2017. Los primeros partidos de temporada el Celta no se defendió. Comenzó el campeonato con dos derrotas consecutivas. Los partidos del conjunto gallego han sido variados, no ha tenido una racha de victorias consecutivas. Pero cabe destacar la goleada por cuatro goles a cero al Eibar en la jornada seis. También consiguió empatar en el Camp Nou por dos a dos al campeón de la liga. Pero este empate supo a poco cuando le siguieron dos derrotas consecutivas ante el Valencia y el Villarreal. 

El Celta acabó el año con un buen sabor de boca ganando por tres goles a uno en Riazor. Continuaba la buena racha a principios de año. Lograba el segundo empate ante el Barceola, esta vez en Balaídos y en los octavos de final de la Copa del Rey. Tres días después el Celta volvía a empatar con otro de los grandes, el Real Madrid. El partido acababa con un empate a dos en el Santiago Bernabéu. Este empate y esta buena racha finalizó con una goleada del Barcelona al Celta en la vuelta de octavos de final de la Copa del Rey. 5 goles a cero fue el resultado que eliminó al Celta de la copa. 

Tras esta derrota continuó la irregularidad en los partidos. Ganaban, empataban y perdían pero el sueño de Europa seguía en pie. Hasta que los últimos meses de campeonato el Celta comenzó a caer en partidos que debería haber optado a los tres puntos. Empató ante un Málaga que se ha encontrado último durante todo el campeonato y ante un Athétic de Bilbao. Parecía que levantaba cabeza empatando en Balaídos contra el Barcelona y contra el Valencia de manera consecutiva. Estos dos empates supieron a poco cuando fueron seguidos de una derrota ante el Villarreal y Real Madrid por goleada, intercalada por un empate ante el Deportivo que ha acabado descendiendo. 

El Celta ha sido un equipo muy irregular. Ha conseguido plantar cara a grandes equipos y a su vez ha desaprovechado y dejado escapar puntos en partidos decisivos para ir subiendo en la clasificación del campeonato. Europa será el objetivo del año que viene y luchará para salir del décimotercer puesto por segunda temporada consecutiva y entrar en puesto europeos.