El broche de una temporada decepcionante para el Granada CF fue con una victoria sobre el Cádiz CF. El equipo gaditano se jugaba en Los Cármenes entrar en el playoff de ascenso pero se mostró fundido y se encontró con un Darwin Machís demoledor que anotó los dos goles que le dieron el triunfo a los rojiblancos. El conjunto de Portugal exhibió su mejor juego desde que el burgalés se ha hecho cargo del equipo, lo que le sirvió para cerrar la temporada ofreciendo una buena imagen ante su desilusionada afición.
Portugal introdujo dos novedades en el once del Granada CF: Quini y Saunier. Rui Silva volvió a ocupar la portería del equipo rojiblanco y Víctor Díaz, Germán y Álex Martínez actuaron en la defensa. Chico Flores se quedó en el banquillo. En la medular jugaron Baena y Alberto Martín, con Espinosa en la mediapunta. Quini jugó por la banda derecha, Machís por la izquierda y Adrián Ramos en la delantera.
El Cádiz jugó en Granada con una alineación formada por Cifuentes en la portería; Correa, Servando, Mauro y Brian Oliván en la defensa; Abdullah y Álex Fernández en la medular y por delante, Barral, Perea, Álvaro García y Jona.
El balón echó a rodar en Los Cármenes, con la presencia del expresidente Quique Pina en el palco, ahora como consejero del equipo gaditano. El Granada se adueñó del esférico en los primeros compases del partido. Los rojiblancos tocaban en la medular, sin crear nada de peligro ante un Cádiz que se jugaba su futuro. A los seis minutos, el Cádiz sufrió el primer contratiempo con la lesión de Jona. El jugador fue atendido pero no pudo continuar y tuvo que ser cambiado a los 15 minutos. En su lugar entró Aitor. No iba a ser la única lesión en el conjunto gaditano pues antes de la media hora de juego se tuvo que retirar también Barral. El ex del Granada, despedido con pitos, fue sustituido por Carrillo.
Las aproximaciones más peligrosas al área contraria fueron para el Granada CF. Un activo Espinosa intentó conectar con Ramos, pero el disparo del colombiano se lo detuvo Cifuente. El Cádiz apenas generaba peligro y estuvo alentado siempre por los cánticos de apoyo de su afición, que pobló las gradas de gran parte de unos de los fondos.
Continuas faltas hubo durante la primera parte. Rober Correa fue el primer amonestado de un partido cuyo marcardor se alteró un poco antes de llegar al descanso. En el minuto 42, Darwin Machís se sacó un zapatazo desde fuera del área para batir a Cifuentes y poner el 1-0. Con ese resultado se marcharon ambos equipos al vestuario.
Un Cádiz con poca reacción
En la segunda parte, al Cádiz le siguió costando crear peligro. El Granada CF se sentía cómodo, ofrecía con más soltura su juego que en partidos anteriores. Sin presión, los rojiblancos estuvieron más a gusto. El conjunto amarillo, con la necesidad de tener que marcar para seguir con opciones de entrar en el playoff, trató de inquietar a Rui Silva y lo consiguió en el minuto 48, cuando Carrillo remató de cabeza junto al palo izquierdo un buen balón centrado por Brian Oliván. Los cadistas celebraron con júbilo un gol que les hacía soñar.
El Cádiz sufrió una lesión más: Alberto Perea tuvo que ser sustituido por Salvi Sánchez. Y se llevó un golpe aún más duro con la expulsión por doble amarilla de Rober Correa, que le dejó con diez. Kunde y Puertas refrescaron al Granada, sustituyeron a Alberto Martín y a Quini. Pero lo que terminó de noquear al Cádiz fue el segundo gol del Granada CF, obra también de Machís. El venezolano avisó con un disparo al palo en el 55' y en el 80' marcó el 2-0.
Machís fue cambiado en el 82' por Joselu y fue despedido con una gran ovación por los granadinistas que, al menos, se marcharon contentos con la victoria de su equipo sobre el Cádiz. La afición cadista, decepcionada por la derrota de su equipo que le impide disputar el playoff de ascenso, también dio su aliento a los jugadores del conjunto amarillo al final del partido. Los Cármenes echó así el cierre hasta la próxima temporada.
