Después de levantar el título de la Copa de la Reina, en el Barça femenino ya han habido cuatro cambios en tan solo cuatro días: un alta y tres bajas. Olga García va a probar suerte en otro lado para intentar tener minutos, cosa imposible este año en el Barça. Laura Ràfols ha dado su adiós definitivo del fútbol profesional y Andrea Giménez, la tercera portera, al igual que Olga, va a probar suerte lejos del Barça. Una delantera y dos porteras.

Stefanie Van der Gragt es la primera incorporación de cara a la temporada que viene. Ni portera ni delantera, Van der Gragt es una defensa holandesa. Con esta llegada, parece más que inminente la marcha de Line Roddik, quien tampoco ha tenido minutos con Fran Sánchez a lo largo de esta temporada. 

Van der Gragt llega a Can Barça procedente del Ajax y vestirá la elástica azulgrana durante dos temporadas, hasta el 30 de junio de 2020. La futbolista de 25 años se coronó campeona de Europa con la selección holandesa el pasado verano junto a Lieke Martens, con quien compartirá vestidor a nivel internacional como en el FC Barcelona.

Una central con una gran evergadura (1'78 cm) que va a ayudar al femenino en la recperación de balones y en las salidas desde el propio campo. Al ser tan alta, da una seguridad en las jugadas a balón parado, cosa que el Barça femenino ha echado de menos esta temporada. La más de 50 veces internacional con Holanda no ha podio ocultar su emoción por fichar para el club azulgrana: "El Barça es un equipo muy bueno, es un sueño hecho realidad jugar aquí". Van de Gragt ha reconocido a Martens como su apoyo dentro del equipo: "He hablado con Lieke Martens sobre cómo va todo aquí en Barcelona. Es una ventaja que ella juegue en el Barça, eso ayudará a mi adaptación". La nueva incorporación ha dejado claro us objetivos al querer venir a Barcelona: "Mis objetivos son mejorar como jugadora y ganar títulos".

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