"Hasta aquí hemos llegado". Aunque pueda parecer una expresión triste, y realmente lo es pues suele aplicarse a un desagradable y melancólico punto final, en el caso del Real Sporting de Gijón B, en cierto modo, quizá no lo sea tanto. Es cierto, los pupilos de José Alberto han caído eliminados en la segunda ronda del playoff de ascenso a Segunda División. No obstante, su entrega, carácter, pundonor y, sobre todo, buen fútbol, ha llenado de gozo el corazón de la parroquia sportinguista a lo largo de los dos últimos cursos.

En un día triste, pues tanto el primer equipo como el filial han hincado rodilla en sus respectivas fases de ascenso, puede ser que los 'guajes' hayan puesto la nota positiva, y es que este equipo, recién llegado desde la Tercera División asturiana, ha deslumbrado a propios y a extraños con su juego alegre y dinámico. Solo un gigante del fútbol español como el Elche CF, con un tal Nino a la cabeza, ha sido capaz de tumbarle y eso son palabras mayores. Tampoco sería justo olvidar que, a principios de temporada, el objetivo de esta plantilla, lejos de conseguir el ascenso de categoría, era la salvación. Más mérito aún si cabe. En pie. No cabe otra que aplaudir el gran papel que el Sporting B viene desempeñando en los últimos tiempos. Chapeau.

Imagen: Diego Blanco - VAVEL
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Un rayo de esperanza

Aunque el filial se mantuvo "a remolque" del Elche prácticamente la totalidad del encuentro, Mareo nunca pensó en tirar la toalla. Eso jamás. Gracias a las grandes intervenciones de Dani Martín, el Sporting B se mantenía vivo en el partido y, por ende, en la eliminatoria. Más aún cuando a falta de diez minutos para el final Alberto Cayarga se valió de las dudas en la zaga ilicitana para poner por delante a los suyos. En ese momento, el tanto del avilesino valía un billete para la final del playoff de ascenso a Segunda División. Casi nada.

Apareció el de siempre

Sin embargo, el destino tenía reservada un cruel desenlace para el filial del Sporting. ¿El culpable? El de siempre, Nino. En el día de su trigesimoctavo cumpleaños, el ariete almeriense volvió a aguar la fiesta rojiblanca. Suyo fue el tanto del empate, a escasos cinco minutos para el término del choque. Para mayor castigo, el Elche acabaría por llevarse la victoria ante un Sporting B volcado al ataque con un gol de Sory. Tocado y hundido.

Así se llegaría al final de una temporada de ensueño en la Escuela de Fútbol de Mareo. Tal y como señaló José Alberto en rueda de prensa, la afición puede estar "orgullosa de sus jugadores" ¡Hasta el año que viene, 'guajes'!

Imagen: Diego Blanco - VAVEL
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