Con tan solo 19 años ha derribado la puerta del primer equipo, ha entrado en la plantilla con todas las de la ley y es un elemento fundamental en los esquemas del entrenador, Michel. Hablamos de Fran Beltrán, la perla de la cantera que se ha graduado con nota en la presente temporada, eso le hace merecedor del presente reconocimiento. 

Muchos podrían dudar de esta consideración, pues no es el que más goles mete, ni el que más asistencias reparte, pero si algo nos ha traído el fútbol de toque en los últimos años es la necesidad de jugadores más versátiles, con otras funciones en el equipo.

Estamos hablando posiblemente del jugador más regular del equipo en toda la temporada, 3199 minutos son los que ha disputado, repartidos en 40 partidos (recordemos que se perdió uno por acumulación de tarjetas) de 42 posibles, 37 de ellos saliendo en el 11 titular, convirtiéndole estos números en uno de los jugadores con más rodaje sobre sus piernas, dando muestra de la altísima confianza que ha depositado el entrenador en él para una posición clave en el campo.

El canterano rayista, aporta en todas sus actuaciones, recuperaciones de balón, cobertura a sus compañeros, refuerzo en otras posiciones, salida de balón siempre con gran criterio, presión arriba e incluso llegada al área, mostrando un buen disparo exterior. Todo ello supone un gran trabajo en la sombra, como aquel del que hablaba Vicente Del Bosque en referencia a Busquets, ese que nunca se reconoce ante los grandes focos, salvando las distancias, Beltrán bien podría ser una nueva versión del centrocampista catalán, con todo el futuro por delante, y desde luego no va por mal camino.

Con él en el campo, el equipo ganaba claramente en seguridad, en toque de balón, siendo muchas veces los minutos que el joven madrileño no disputo los que mostraban una peor versión del equipo de Michel. Por otro lado, su socio en el centro del campo, Unai López, ha encontrado en el canterano la pareja de baile ideal, encontrando en él una compenetración casi perfecta, llevando entre los dos el timón del equipo, como dos veteranos curtidos en mil batallas.

Siempre encontramos a aquel jugador que juega un gran partido y todos los medios parecen adorarle en algunas jornadas, pero no mantiene ese nivel en todas las citas. Nuestro protagonista ha derrumbado la puerta a base de trabajo y sacrificio, sin fallar prácticamente nunca, sin hacer actuaciones de relumbrón pero manteniendo, sin bajarlo, un nivel de juego de entre los más altos de la plantilla, sin lugar a dudas, lo que le dio la condición de titular indiscutible.

Recordemos que estamos hablando de un jugador de 19 años, que se ha consolidado con todas las de la ley en el equipo, siendo posiblemente uno de los mejores “fichajes” de la temporada, a coste cero al ser canterano y rayista hasta la médula.  El factor de la edad, que siempre acostumbra a  ser un hándicap en estos casos, no fue problema para alguien que ha demostrado madurez e inteligencia, normalmente impropias de un jugador de sus características.

En resumen, el Rayo ha encontrado en Fran Beltrán un jugadorazo de presente, pero sobretodo de futuro, con tan solo 19 años puede convertirse en toda una leyenda del rayismo, un camino hacia el Olimpo que, sin duda, ya ha empezado a recorrer.

Es por todo ello que, para esta redacción, Fran Beltrán ha sido por su enorme regularidad el mejor jugador del Rayo Vallecano en la temporada 17/18, la del primer campeonato liguero oficial en las vitrinas del conjunto franjirojo.