Cuando se habla del Sporting de Gijón son varias las imágenes que vienen a la mente. Una de ellas es, sin lugar a duda, su afición, conocida como "La Mareona". Este es uno de los bienes más importantes que posee hoy en día el club, ya que, por suerte, su fiel hinchada se desvive por su club esté donde esté y esté como esté. En la época dorada del club, cuando el Sporting desfilaba orgulloso por Europa, la afición realizaba desplazamientos masivos por distintos campos para intentar conseguir alguna gesta contra aquellos gigantes del fútbol, por ejemplo el Milán de Van Basten o Gullit.

El seudónimo no posee una fecha exacta de creación ni un origen concreto, aunque se sospecha que pudo haberse originado porque al congregar los desplazamientos a tantas personas y, atendiendo a que Gijón tiene costa, puede hacerse un símil como si de una ola de aficionados se tratase. Pasaban los años, el club empezaba a entrar en una dinámica paupérrima y, por ello, la afición empezaba a perder la esperanza. No sería hasta la llegada de un tal Manolo Preciado, quien cogería las riendas del club desde el banquillo, cuando ese sentimiento y esa pasión reviviesen para no irse nunca más. El "lavado de cara" con el técnico cántabro hizo que aumentase la demanda para los desplazamientos, se jugase algo importante o no.

También hubo años duros, años en los que "La Mareona" empezaba a perder fuerza y pululaba por el aire esa sensación de pérdida de identificación con el equipo. Para alegría de todos, esa extraña situación dio un giro de 180 grados cuando, en la temporada 2013/2014, Abelardo fue elegido para conseguir la hazaña del ascenso, lograda por el técnico asturiano en la siguiente temporada.

A continuación, VAVEL se servirá de la máquina del tiempo para los mayores y más importantes desplazamientos de aficionados desde que Abelardo cogiese las riendas del primer equipo.

Riazor, el estadio más demandado del norte

Existen muchos campos del norte a los que siempre ha acudido la afición rojiblanca, como Los Campos de Sport El Sardinero, San Mamés o Anoeta. Sin embargo, ninguno ha sido tan demandado como Riazor, feudo del Deportivo de la Coruña, donde siempre, y hay que recalcar la palabra siempre, se pueden observar imágenes, o vídeos, del fondo reservado para los visitantes teñido en su totalidad con los colores rojo y blanco y alguna que otra bandera de Asturias.

No se sabe a ciencia cierta cual ha sido el mayor número de aficionados desplazados a Riazor, pero lo que sí se sabe, es que, en febrero de 2014, llegaron a viajar alrededor de 6500 aficionados del Sporting para presenciar el partido entre ambos conjuntos en Segunda División.

El incremento de la demanda, año tras año y temporada tras temporada, se debe, principalmente, a la máxima rivalidad que existe entre ambas aficiones, siendo este un plus más a la hora de fijar, con color rojo, un desplazamiento seguro en tu calendario futbolístico. En estos partidos se respira un buen fútbol, se respira un choque de los del norte.

Coliseum Alfonso Pérez, rompe récords de desplazados

Este fue, sin duda, uno de los desplazamientos donde se jugaban algo más que tres puntos y, como no, la afición, una vez más, batió uno de los récords de mayor asistencia en la temporada de "Los Guajes" en Primera División, llegando a viajar alrededor de 5000 personas. Tanto Getafe Club de Fútbol como Sporting de Gijón se jugaban la permanencia en Primera.

El club hizo un llamamiento a todos los que pudiesen viajar en la penúltima jornada de la temporada para llevar en volandas al equipo y conseguir la mayor gesta de toda la temporada. Desde ese momento toda una afición empezó a decorar Gijón con pancartas de ánimo. Los fieles aficionados subían hasta Mareo para colgar toallas de color rojo y blanco justo en frente del campo de entrenamiento para animar con un pedazo de su alma. Las colas para conseguir una entrada ya se empezaron a hacer de madrugada. Nadie quería perderse tal acontecimiento. En menos de un día se colgó el famoso cartel de "localidades agotadas" y desde ese momento comenzó la cuenta atrás para poder conseguir el objetivo de la salvación.

"La Mareona" se hizo notar en el feudo azulón. Sus gritos de animación no cesaron hasta que el árbitro decretó el final del partido. El encuentro tuvo momentos de euforia, llegando su momento cumbre con el gol del Sporting, sus momentos de frustración, con el gol del Getafe, y sus momentos de rabia, con la expulsión de Nacho Cases.

Sevilla tiene un color especial

El buen ambiente entre las aficiones del Real Betis Balompié y del Sporting de Gijón no viene de hace escasos años, sino que viene de hace ya algunas décadas. Todas las amistades tienen sus puntos álgidos y, en este caso, se trata del ansiado ascenso que, en 2015, les devolvía, sin poder fichar, a la máxima categoría del fútbol español. ¡Qué mejor lugar para hacerlo que en un estadio como el Benito Villamarín, donde te sientes querido por los rivales!

Horas previas a tal importante choque ya se podía ver el buen ambiente que había por las calles de Sevilla. Por todos los rincones se podían vislumbrar banderas del Betis y del Sporting, sonaban los himnos a más no poder, el himno de Asturias y, sobre todo la hermandad entre ambas aficiones. En un día soleado, donde todo eran sonrisas e intercambios constantes de bufandas y camisetas, nada podía fallar.

Si el día empezaba con "un color especial", acababa aún mejor, con un Real Betis que festejaba el ascenso conseguido hace ya unas jornadas y, además, el del Sporting de Gijón, conseguido in extremis gracias a un gol del Lugo en Montilivi. 

Reino de León, cercano y coqueto

A pesar de que el Reino de León es uno de los estadios más cercanos a Gijón, en los últimos años solo recibió la visita de "La Mareona" en la presente temporada, un miércoles del pasado mes de octubre. A priori el día y la hora eran claros factores que jugaban en contra de los aficionados rojiblancos ya que, a su mayoría, se les hacía imposible viajar a uno de los desplazamientos más cercanos de la temporada.

No obstante, fueron muchos los que se desplazaron a pesar de los inconvenientes mencionados anteriormente. En total se registró una media de 5000 aficionados, aunque muchos no tenían entradas, por lo que se esperaba un lleno absoluto de la zona visitante a eso de las 21:00 horas. En los instantes previos a tal choque se podía apreciar el buen ambiente que allí había porque existía una buena combinación de aficiones hermanadas.

Una vez arrancó el encuentro, la afición asturiana empezaba a entonar el himno del club y cánticos que se pueden escuchar cada día en El Molinón – Enrique Castro 'Quini'. Pese a los intentos de la grada local de silenciarles con arengas hacia su equipo, se demostró una vez más que "La Mareona" es una de las aficiones más fieles y que siempre viaja con su equipo.

Ponferrada, ciudad amada por los rojiblancos

Ponferrada es una ciudad con una población ligeramente superior a los 60.000 habitantes, perteneciente a la Comunidad Autónoma de Castilla y León, a la provincia de León y a la comarca de El Bierzo. Como toda ciudad, posee bienes de interés cultural, pero lo que verdaderamente hace que esta ciudad figure en el presente reportaje es su equipo de fútbol, la Sociedad Deportiva Ponferradina, que actualmente milita en la Segunda División B. Este humilde equipo pasó varias temporadas en la Segunda División y, casualidades de la vida, se tuvo que medir en varias ocasiones contra el cuadro gijonés.

Todo comienza en septiembre de 2013, cuando alrededor 2.500 sportinguistas tiñeron la capital del Bierzo de rojiblanco, coincidiendo con las fiestas patronales de la Virgen de la Encina, patrona de la ciudad. Si ya de por sí en esas fechas es difícil caminar por el centro de Ponferrada sin encontrar personas cada dos baldosas, ese año era imposible ya que a media mañana "La Mareona" inundaba, a pasos agigantados, las calles de la ciudad y animaba, más aún si cabe, la fiesta. Que el encuentro coincidiera con el día de Asturias, no impidió el desplazamiento.

José Zorrilla, polémicas a la orden del día

Valladolid es otro de los destinos fijados en el calendario de todo aquel sportinguista que disponga de tiempo para poder ver a los suyos lejos de Gijón. 

El motivo de la visita a esta peculiar ciudad no es por sus encantos arquitectónicos, que también, sino más bien por su atractivo futbolístico. En esta ciudad habita un histórico del fútbol español, un club que vio jugar en su feudo a históricos como Carlos Valderrama o René Higuita entre otros muchos. Este es el Real Valladolid Club de Fútbol o, simplemente, "El Pucela".

Aficionados asturianos en las horas previas. | Imagen: Fer Rodríguez.
Aficionados asturianos en las horas previas. | Imagen: Fer Rodríguez.

Las relaciones entre vallisoletanas y gijoneses nunca fueron muy buenas, debido todo ello al hermanamiento con el eterno rival, con el Real Oviedo. Los piques se centran, principalmente, en el ámbito futbolístico, llegando hasta el punto de inflar los precios de las entradas para acortar la visita de aficionados rivales. Esto estalló cuando el Real Valladolid, allá por 2009, puso un precio de cinco euros en las entradas para sus socios y elevó a 75 euros, datos reales lo demuestran, las entradas para los asturianos que querían ver una nueva gesta del equipo dirigido aquel entonces por el gran Manolo Preciado. Ahí no acabó la cosa, ya que solo decidieron enviar unas 1859 entradas frente a las 6000 que solicitó el Sporting de Gijón. Si se repasa la hemeroteca es posible comprobar como en el partido de ida los vallisoletanos compraron su entrada por 35 euros. Un precio mucho más cercano a la realidad de nuestro fútbol.

El encuentro de este curso se lo llevaron los asturianos por la mínima, gracias a un gol tempranero de Rubén García. Todo ello provocó la euforia contenida por los asturianos en las gradas tras los nervios, ya que fue uno de los encuentros más importantes de la temporada como visitantes. La siguiente parada sería el Ramón de Carranza, donde se intentaría cosechar la novena victoria consecutiva en competición regular.

Panorámica del campo desde la grada visitante. | Imagen: Fer Rodríguez.
Panorámica del campo desde la grada visitante. | Imagen: Fer Rodríguez.

Empate en tierras gaditanas

Cádiz, capital y provincia de Andalucía, pertenece a la Comarca de la Bahía de Cádiz y que tiene un total de 118.048 habitantes y 8.875,79 habitantes por kilómetro cuadrado. Al igual que el resto de sus comunidades vecinas, alberga vistosos e históricos monumentos que hacen de esta una bella ciudad, siendo el centro histórico de Cádiz, la Catedral de Cádiz y la playa de la Caleta claros ejemplos de ellos.

El motivo de la visita a esta peculiar, e icónica, ciudad del sur de España, no es por sus encantos arquitectónicos anteriormente nombrados, que también se pueden visitar después de comer, sino más bien por su atractivo, e histórico, equipo de fútbol. En esta ciudad habita uno de los históricos del fútbol español, un club que tuvo entre sus filas a icónicos futbolistas como Pepe Mejías, Kiko Narváez, Paco Baena y el que siempre está en el puesto número uno, el único e inigualable mago del balón gatidano, Don Mágico González.

Momentos de euforia de la afición asturiana. | Imagen: Fotos Sporting.
Momentos de euforia de la afición asturiana. | Imagen: Fotos Sporting.

Las relaciones entre gaditanos y rojiblancos son buenas, ya que nunca tuvieron ningún tipo de problemas siempre que se enfrentaron en partidos normales y en partidos de alto riesgo. Sin embargo, la afición asturiana respondió a la llamada del club y fueron 700, estadísticamente demostrado, sportinguistas los que estuvieron presenten en el Nuevo Ramón de Carranza. Algunas peñas viajaron ya el jueves y se marcharon días después del encuentro, otras decidieron ir el viernes y marchar una vez finalizase el encuentro. En las horas previas se hicieron notar los allí desplazados por las zonas más icónicas de la ciudad, ya que iban todos juntos y entonaban cánticos a favor de los suyos, entre los que se encontraba el himno de Asturias, acompañado todo ello con una gaita asturiana.

Parte de la grada visitante. | Imagen: Pelayo Rodríguez.
Parte de la grada visitante. | Imagen: Pelayo Rodríguez.

Una vez dentro del terreno de juego, el ambiente fue uno de los mejores. Todo el estadio lleno y cánticos en todo momento, sobre todo el entonado por los asturianos en el minuto nueve en honor de Enrique Castro “Quini”, muy respetado por la afición rival en todo momento. En este caso los de Rubén Baraja se llevarían un único punto y merecido, ya que si no llega a ser por Diego Mariño, una vez más, los asturianos hubiesen lamentado una derrota que no podrían permitirme por aquel entonces.

Parte de la grada visitante. | Imagen: Diario de Cádiz.
Parte de la grada visitante. | Imagen: Diario de Cádiz.

A la salida del estadio tampoco se produjeron incidentes, por lo que cada aficionado se fue con distintos sabores tras ese punto y algunos asturianos pondrían rumbo al norte para mentalizarse del encuentro frente al Albacete Balompié.

La Romareda, un duro golpe

Partido de Primera División, partido de históricos, en definitiva, partido de los que gustan a todo futbolero. El Sporting de Gijón tendría el difícil reto de visitar La Romareda, el talismán que tanta suerte le estaba dando a su rival, el Real Zaragoza, en estas últimas jornadas. Unos tres puntos que, para los asturianos, significaba mucho, ya que podían acechar los puestos de ascenso directo a LaLiga Santander.

Aficionados asturianos en las horas previas. | Imagen: Fer Rodríguez.
Aficionados asturianos en las horas previas. | Imagen: Fer Rodríguez.

Zaragoza, capital de Aragón, era la sede que iba a albergar un duelo entre dos de las aficiones más pasionales de la actual categoría de plata y, cómo no, entre dos de los cuatro mejores de la clasificación de la categoría de plata. La tensión estaba por el aire, ya que los tres puntos ponían a los maños más cerca de acechar los puestos de ascenso directo y a los asturianos con posibilidades de entrar en los puestos anteriormente mencionados. Se podría decir que era un completo todo o nada, un all in como se suele decir en el póker. Debían de poner toda la carne en el asador y cocinarla a fuego lento para poder llevarse el encuentro.

Panorámica del campo desde la grada visitante. | Imagen: Laura Cueto.
Panorámica del campo desde la grada visitante. | Imagen: Laura Cueto.

El partido comenzó igual que terminó, dominio claro de los maños que pasaron, como si de una apisonadora se tratara, por encima de los asturianos y acamparon a sus anchas por todo el terreno de juego. Los goles locales llegaron de fallos graves defensivos, siendo Borja Iglesias el encargado de poder encarrilar el partido a favor de los suyos.

Peña Sportinguista Covadonga

Para entender todo lo que transmite “La Mareona”, es necesario hablar con la segunda peña más antigua del club, Peña Sportinguista Covadonga, quien se fundó en diciembre de 1974 y que VAVEL Sporting ha podido entrevistar a su presidente Arcadio Noval, más conocido como Cholo, quien mencionó los momentos más importantes que vivieron con el club y la cantidad de icónicos jugadores que les visitaron. Esta peña se encuentra localizada en Carbayin Alto, perteneciente al concejo de Siero que está situado en pleno centro de Asturias.

Creación de la Peña

Pregunta. ¿Cómo eran los procesos legales que tuvieron que seguir, por aquel entonces, para fundar la Peña?

Respuesta. Fueron muy difíciles porque, en el momento que hubiera alguno que tuviera algo de huelga, te lo tiraba todo para atrás el gobierno civil. Nosotros tuvimos que ir a hablar con el jefe de la Policía de Asturias que, por mediación de él, fue el que nos autorizó el poder fundar la peña.

Generación favorita

P. Han sido muchas las generaciones de futbolistas que pasaron por el Sporting. ¿Con qué equipo, de todos los que pasaron, se siente más identificada la Peña?

R. Con el del 78, 79 u 80. Con las generaciones de esos años.

Desastres de la familia Fernández y posibles soluciones

P. Sois una peña que ha experimentado la llegada de la familia Fernández y sus innegables consecuencias. ¿En qué ha fallado durante su mandato la familia Fernández y cuál sería la solución?

"Yo soy uno de los que digo que Fernández no se apropió de un euro"

R. Para mí modo de ver y de pensar, el mayor error de la familia Fernández fue la mala organización. Yo soy uno de los que digo que Fernández no se apropió de un euro del Sporting y ahora, la solución para mí, era que alguien comprara las acciones a los Fernández. Hay que darse cuenta también que ahora mismo que, el consejo de administración encabezado por Javier, quitó la deuda del Sporting, una deuda que se generó al venir las sociedades anónimas porque de ahí empezó la deuda.

P. ¿Estaría a favor de un accionario popular?

R. Yo creo que en Gijón hay gente que puede comprar al Sporting y que sea de Gijón y que sienta al Sporting. Estoy a favor del accionario popular al cien por cien.

P. ¿Cómo era, por aquellos años, ser del Sporting?

R. Ser del Sporting en Carbayin fue muy fácil siempre. El Sporting era querido en toda España y nosotros, desde el cuatro de diciembre del 74 que se inauguró la Peña, todos los años hacemos un viaje, como el que haremos este año. El Sporting y su afición se ve que son queridos por todos los lados porque nosotros nunca tuvimos ningún problema en 44 años que tiene la Peña. Fuimos a Sevilla con los del Betis y como si estuviéramos en casa.

Quini recibiendo una placa de la Peña. | Imagen: Archivo Peña Covadonga.
Quini recibiendo una placa de la mano de Luís. | Imagen:

P. ¿Hubo alguna afición o algún equipo que os tratara mal?

R. Nunca, en ningún lado. Mejor en unos sitios que otros. En algunos campos, como en el antiguo campo del Recreativo de Huelva o en el del Betis, tuvimos que esperar un buen rato para poder salir. Sin embargo en Málaga nos dijeron que teníamos que salir un cuarto de hora más tarde y los Ultras del Málaga, que estaban en frente de nosotros, dijeron que hasta que no saliéramos nosotros ellos no salían porque se quedaban por solidaridad con nosotros.

Viajes a El Molinón y por España

P. ¿Cómo os organizabais para asistir a los encuentros tanto en El Molinón como en otros estadios?

"El Sporting nos pagaba el autobús"

R. Para ir a El Molinón no, porque el autobús que ponemos nosotros ya lleva casi 40 años puesto ya. De mano, durante dos o tres años, nos pagaba el autobús el Sporting  y nosotros no cobrábamos nada a la gente.

Miembros de la Peña en su desplazamiento a Cádiz. | Imagen: El Comercio.
Miembros de la Peña en su desplazamiento a Cádiz. | Imagen: El Comercio.

Venta de entradas

P. ¿Qué os parece el sistema que utiliza el Sporting para repartir las entradas de las que dispone, sobre todo, en los partidos de fuera?

R. Eso es un poco difícil a la hora de quedar bien con todo el mundo porque no puedes satisfacer a toda la gente.

Declive del club

P. ¿Cuáles creen que son los principales aspectos culpables del declive del equipo?

“Vega Arango estaba supeditado por la Familia Fernández”

R. La mayoría de culpabilidad la tienen los del palco porque no supieron gestionar las cosas. Se cambió mucho tiempo de presidentes que no valía ninguno, y el único que valía algo tuvo que marchar porque lo quemaron. Para la Peña fue lo mejor Vega Arango, pero tampoco lo dejaron la última época funcionar a su manera.

Oportunidades a los del filial o a los de fuera

P. ¿Cantera o cartera?

R.  Al cien por cien cantera, pero con algún fichaje. Predomina siempre más lo de casa porque la política de fichajes del Sporting es nefasta. Cuando tuvo Abelardo con los guajes, el motivo de subir a tantos de la cantera fue obligado porque no había dinero.

P. ¿Qué opinión tienen de Herrera?

"Herrera hizo socios con su llegada"

R. Herrera que cuando lo ficharon yo me alegré porque tenía experiencia y jugó aquí. Creo que Herrera hizo socios con su llegada, pero después fue nefasto, si no lo llegan a echar a estas horas estaríamos más abajo.

P. ¿Cuál ha sido el mejor entrenador que ha pasado por El Molinón desde el 74?

R. Vicente Miera porque nos metió en competiciones europeas y después Noboa por las dos finales de la Copa del Rey.

P. ¿Sensaciones cuando se ganó tres a cero al Torino en El Molinón?

R. El Torino perdió aquí tres a cero, aquel día se fundió El Molinón. Nadie sabe lo que es ver a Ferrero sacar un córner atrás, otro nuevamente atrás y al tercero sacarlo al primero y marcar gol directo. Se fundió el campo en septiembre del 78.

P. La peña ha sido testigo desde el 74 de grandes momentos en la historia del Sporting, entre ellos la época dorada. ¿Cómo se vivió el subliderato en Primera?

R. Son cosas que no hay palabras para describir, son momentos únicos.

Peñistas en un autobús en su viaje a Granada. | Imagen: Archivo Peña Covadonga.
Peñistas en un autobús en su viaje a Granada. | Imagen: Archivo Peña Covadonga.

P. ¿Cómo se vivió el ascenso en Sevilla?

“Cuando el ascenso del 2008 a mí me había dado hace poco un infarto y quería ver al Sporting en Primera y, cuando subimos, lloré como nunca por poder verlo de nuevo arriba"

R. Yo no puedo narrar con palabras lo que viví, lo que sentí y lo que lloré como un crío. Es una experiencia única y no hay palabras para describirlo.

P. ¿Cómo se vivió la marcha de Quini de El Molinón?

R. Muy mal porque Quini era ya un icono en el Sporting y, marchar del club, al 99 por ciento de la afición les entristeció mucho y, de haber votación para decidir si se marchase, hubiesen votado que no para que se quedase.

P. ¿Cómo vivió el sportinguismo el secuestro de Quini?

R. Muy mal, eso ya es indescriptible. La afición lo vivió con mucha tensión y mucha incertidumbre porque nadie sabía si estaba vivo o muerto. Me acuerdo el día que lo liberaron, que lloraba como un crío porque fue de los que más trofeos vino a recoger a las cenas de la Peña. Conocíamos a sus padres y a Jesús Castro, su hermano.