La selección de Colombia dijo adiós al Mundial de Rusia tras perder en la tanda de penaltis contra Inglaterra después de empatar a uno durante 120 minutos. Harry Kane adelantó a los ingleses desde el punto de penalti en el minuto 57 de partido. Inglaterra acariciaba ya los cuartos de final cuando el rey colombiano, Yerry Mina, empató de cabeza en el 90+3. Esa diana hacía soñar a todo un país y, con James en la grada, Colombia tenía que  confiar en los 11 del campo para batir a Pickford.

Yerry Mina hizo un partido excelente, ganando siempre los balones al aire contra los ingleses y tapando sus llegadas al área de Ospina. Salvó a su selección de la eliminación forzando la prórroga. Con el de octavos, ya fueron tres los goles decisivos de cabeza que Yerry Mina marcó durante su trayectoria en el Mundial: el primero contra la selección polaca, otro contra Senegal que le dio a Colombia el primer puesto del grupo, y ese tercero frente a Inglaterra.

Después del empate a uno, Yerry Mina se dolió de la parte interior del muslo, entre el grácil y el aductor largo. Sin embargo, pese a hacer saltar las alarmar, Yerry Mina siguió en el terreno de juego durante toda la prórroga. Terminaron los 120 minutos de juego sin goles por lo que se decidió en la tanda de penaltis. El papel de Mina en ese tramo del encuentro fue el de animar. El 13 de la selección de Colombia no fue ninguno de los cinco elegidos para lanzar lo penaltis.

Aunque David Ospina logró adivinar la trayectoria del penalti que lanzó Jordan Henderson, Mateus Uribe y Carlos Bacca fallaron los suyos e Inglaterra se impuso por 3-4. Uno de los futbolistas culés más decisivos del Mundial, dice adiós a la competición con un sabor de boca agridulce