El Sporting de Gijón encarrila otra victoria más en un nuevo amistoso de pretemporada, el primero sin Sergio Álvarez en la sala de máquinas del club. Estos partidos no dicen mucho sobre lo que les puede deparar en la nueva temporada, aunque la buena imagen demuestra que irán a por todas. 

Volvía a rodar la pelota por Mareo, volvía el fútbol a Gijón. Los asturianos serían los encargados de mover los primeros la pelota, siendo los que tendrían las primeras ocasiones con André Sousa de por medio. Los de la cuenca intentarían subir las posiciones para ejercer una mayor presión y no permitir al Sporting mover la pelota a sus anchas. Las bandas estarían cubiertas por dos jugadores del Sporting B, pues Isma Cerro era quien tendría dos ocasiones claras de gol mientras que su compañero Álvaro Traver era el que daba los pases y continuaba las jugadas. En el área técnica Rubén Baraja daba instrucciones de vez en cuando y Hernán Pérez exigía más presión a la hora de cubrir la salida de balón de los jugadores rojiblancos.

Los azulgranas dispondrían de ocasiones muy ligeras, aunque Cris Salvador sería el que remataría un balón a placer dado por su compañero Geraldes. Los locales seguían poniendo a prueba a Javier Díaz, portero del Langreo, quien estaba dejando la portería a cero momentáneamente. André Sousa estaba siendo el mejor del encuentro en los primeros compases del encuentro debido a sus pequeños detalles de calidad y a sus potentes tiros que podían perforar las redes de la portería langreana.

Llegada la media hora de la primera parte, era el momento en el que Rubén Baraja decidía mover banquillo y hacer cuatro cambios a la vez, haciendo así debutar a Neftali con la elástica rojiblanca. Sería el propio Neftali el encargado de provocar un penalti que transformaría en gol André Sousa para sumar el primer gol al marcador. Llegaría el descanso con el mismo marcador y con la mayoría de ocasiones para el Sporting de Gijón.

En la segunda parte serían los visitantes los encargados de mover la pelota, aunque pronto recuperarían los rojiblancos el esférico sin apenas acercamiento en los primeros compases del encuentro. Los azulgranas empezarían a mover la pelota y a empezar a tener ligeras llegadas en la portería custodiada por Dani Martín. Seguían pasando los minutos y sería Aimar quien casi marca el golazo del partido, los visitantes empezarían a tener peso en el encuentro.

En el ecuador de la segunda parte sería cuando Rubén Baraja cambiaría a los jugadores que faltaban, haciendo así debutar a Robin Lod. Parecía que todo estaba en calma cuando era Pedro Díaz el que estrellaría el disparo del canterano en el larguero, de haber entrado hubiese sido un auténtico golazo. El susto llegaría en la segunda parte cuando Pablo Pérez quedaría momentáneamente tendido sobre el terreno de juego en un feo golpe contra un jugador del Langreo, quedando todo ello en un susto. El partido no sería del todo bueno hasta el momento que llegaría el segundo gol del Sporting por medio de Robin Lod, quien debuta como jugador del conjunto asturiano.