La UD Almería disputó el pasado domingo su cuarto partido de pretemporada contra el CD Tenerife. Buenas sensanciones y gran trabajo táctico del equipo de Fran Fernández, que siguió repartiendo minutos entre todos su pupilos. El CD Tenerife, rival de categoría, demostró sus aspiraciones para ser un gran candidato la temporada venidera para el ascenso a la Liga Santander.

Fran Fernández puso en liza un once con muchos cambios. Tiempo de prueba para todos los componentes de la plantilla almeriense, y con especial atención a la cantera rojiblanca. Sin embargo, el CD Tenerife sacó un once muy parecido al que será el habitual en la competición de plata. 

Primera parte

La UD Almería comenzó el primer periodo del encuentro con mucho ímpetu y a los tres minutos de partido tuvo su primera ocasión por medio de César de la Hoz tras una gran jugada del canterano Chema, que sin lugar a dudas se está conviertiendo en la sensación de la pretemporada. Jugador con mucha clase y categoría, va dejando poco a poco destellos de la calidad que atesora.

En el minuto 17, tras una gran jugada colectiva del equipo chicharrero llegó un gran gol de Alberto, que de un zapatazo clavó el balón en la escuadra del meta Fernando.

En el minuto 33, Sekou entró sustituyendo a Sergio Pérez, poniendo más mordiente en la parte ofensiva. Más tarde, tras un garrafal error en defensa, Malbasic se plantó frente al meta Fernando que respondió de forma magistral y salvó a su equipo del segundo tanto chicharrero. El primer periodo terminó con las posesiones igualadas entre ambos conjuntos. 

Segundo periodo

El equipo almeriense empezó la segunda parte con el cambio de Callejón por un combativo Corpas, que actuó en el lateral derecho viendo Fran Fernández lo que el jugador puede aportar en esta demarcación.

A los diez minutos de la reanudación, Sekou tuvo, seguramente, la más clara ocasión del encuentro. Una gran jugada colectiva del cuadro almeriense fue centrada desde la banda por Javi Moreno que el canterano remató en el segundo palo para que el meta tinerfeño atajara. Hubiera supuesto el empate rojiblanco.

En el tramo final de partido, el equipo demostró tener confianza y practicamente se adueñó del balón, con el único "pero" de no ser capaz de perforar la meta rival. El partido finalizó con derrota pero dejando buen sabor de boca.