El Real Madrid y su estrategia de fichajes en los últimos años provoca que los jugadores que ganan partidos no pasen de los 22 años. Como Asensio y Vinicius contra la Juventus. Jugadores jóvenes, con talento, progresión y con ganas de "comerse el mundo". Así es como vino Martin Odegaard, aunque con un boom mediático excesivo para su edad. Tras tantear clubes europeos, el Real Madrid fue, finalmente, el equipo que se hizo con las prestaciones del noruego.

Con 16 años, el jugador recaló en el Castilla para coger físico y minutos, y con el objetivo a medio-largo plazo de pertenecer a la primera plantilla blanca. Pero todavía no ha llegado su momento. Tras 18 meses cedido en el Heerenveen holandés su rendimiento allí ha sido irregular y ahora se encuentra en su tercera gira de pretemporada con el Madrid asumiendo que su futuro es otra cesión. La presencia de los mejores jugadores del mundo en su puesto, como Isco, Kroos, Modric o Casemiro, restan las oportunidades al talentoso jugador, que deberá ganarse volver al Real Madrid y luchar por la titularidad con los mejores.

En mayo de este año, el jugador ya tuvo unas palabras sobre su inminente futuro: "No sé qué va a ocurrir, pero si no pasa nada, haré la pretemporada con el Madrid y será una buena oportunidad para mostrarse", afirmó. Lo que está descartado es su regreso al Heerenveen, una etapa que Odegaard considera "un capítulo cerrado".

"Lo importante es que vaya a un equipo donde pueda jugar. Un préstamo a otro conjunto español es una buena alternativa, pero ahora mismo no sé mucho", dijo el joven talento de 19 años en una entrevista con la agencia noruega NTB.

Debutó en Liga con la blanca

El desequilibrante jugador noruego recaló en las categorías inferiores del Real Madrid en 2015 y ya esa misma temporada debutó con el primer equipo, convirtiéndose a los 16 años en el futbolista más joven del club blanco en disputar un encuentro oficial de liga.

Odegaard con la elástica madridista | Foto: Vavel
Odegaard con la elástica madridista | Foto: Vavel