Las instalaciones del Álvarez Rabanal fueron testigo del segundo partido disputado por el filial de la Copa Federación, en este caso frente al CD Covadonga. Javi Benítez, Bogdan Milovanov, Pelayo Suárez, Juanma, Pablo, Isma Aizpiri, Rubén Sánchez, José Gragera, César, Gorka Santamaría y Sandoval fueron los elegidos por José Alberto para comenzar el encuentro, realmente protagonista en los primeros compases del partido. 

Los rojiblancos fueron haciéndose poco a poco con el dominio del encuentro, que había comenzado ciertamente igualado. Sin embargo, a partir del minuto 21, comenzó el tornado sportinguista, que duraría apenas 8 minutos, pero que dejaría sin opciones al Covadonga. 

Rubén Sánchez botó un córner que fue peinado por Santamaría, y que terminaría rematando a placer Juanma prácticamente en el área pequeña. Un par de minutos después fue el turno de Gragera quien colocó el balón en la escuadra, siendo muy complicado para el portero rival. Cuando ya parecía que las aguas empezaban a calmarse, llegó el tercero del filial. Santamaría, esta vez, sí marcaría, de cabeza, tras un pase perfecto de César. 

Comenzó la segunda parte, con los aires más calmados, incluso con alguna ocasión para el Covadonga, que no pudo materializar los goles, pero que creó peligro con los disparos lejanos de Raúl y Font.

Muchos cambios se sucedieron en la ya mencionada segunda mitad, aunque el partido tuvo que bajar de marcha, sobre todo después de la fuerte lluvia que arreció al terreno de juego. Rubén Sánchez fue quien puso el cuarto y definitivo tras una falta que supo realizar de la mejor manera. Levantó el esférico por encima de la barrera, y fue capaz de introducirlo dentro de la portería, dejando sin ninguna opción de reacción al portero rival, ni mucho menos a la defensa, que no pudo hacer más que ver cómo el balón caía en la red. 

Y así fue como el filial sportinguista arrasó, esta tarde, frente al Covadonga.