El Numancia comienza la temporada 2018/2019 con la misma ilusión con la que terminó la pasada. Y es que, a orillas del Duero, todavía resuenan los gritos de júbilo, alegría y emoción, con los que en junio se alcanzó la final del Playoff. Un hecho que no ocurría desde que el equipo ascendió hace diez temporadas a la máxima categoría, y que ha conseguido devolver la ilusión a una afición que, como muchas del panorama nacional, se lo merece por su fidelidad. Las grandes temporadas dejan mermados a los equipos pequeños debido a que los grandes buscan pescar entre tanto éxito.

Ya se podía prever un éxodo de futbolistas hace dos meses al consumarse el no ascenso del equipo pero, sin embargo, la columna vertebral se ha mantenido. Las ausencias más importantes del conjunto rojillo pasan por la portería, donde Aitor Fernández ha volado una vez más, pero en esta ocasión no ha sido para hacer una parada imposible, sino para iniciarse en la máxima categoría del fútbol español, de la mano del Levante. Merecidísimo lo de este portero, que en unos años puede ser uno de los mejores a nivel nacional. Otro que ha hecho las maletas ha sido Íñigo Pérez. El mediocentro rojillo, no pudo decir que no a la llamada del club de su tierra, Osasuna, destino también del técnico Jagoba Arrasate.

Sin embargo, una vez más, el club se ha reinventado para armar un equipo fuerte. Incorporaciones como las de Yeboah, Fran Villalba, Jordi Sánchez, "Pichu" Atienza, Kako, Borja Viguera o Alain Oyarzun hacen del nuevo equipo un rival muy competitivo que promete trasladar alegrías a la grada de Los Pajaritos. Todos ellos, unidos a piezas clave como Marc Mateu, Diamanká, Guillermo, Carlos Gutiérrez o Escassi, y comandados por Aritz López Garai, serán un equipo muy a tener en cuenta en esta emocionante Liga 123.

4-3-3

El esquema ideal de López Garai, tal y como se está viendo en la pretemporada, pasa por el 4-3-3. Asentados sobre un portero experimentado, como será previsiblemente Juan Carlos, la línea de cuatro albergará nombres como los de Carlos Gutiérrez y Atienza en el centro de la zaga, donde Escassi podría tener también presencia en función de los equipos rivales. Los laterales serán para Ripa y Unai Medina, aunque Markel a buen seguro tendrá protagonismo en el derecho y Andoni López en el izquierdo. La línea medular puede ser la que más varíe a lo largo del curso liguero. Un nombre será fundamental: Alberto Escassi. El mediocentro malagueño fue fundamental el año pasado y es un seguro en cuanto al robo de balones y la destrucción de juego rival. Junto a él, Diamanká y Fran Villalba podrían ser los acompañantes, aunque no hay que olvidar nombres como los de Kako, o Pablo Larrea. Y, por último, la línea de ataque, tendrá a Marc Mateu en su extremo izquierdo, para utilizar la referencia de Guillermo o Higinio arriba (incluso Borja Viguera) y Yeboah en la banda derecha.

Aun así, permutas como las de Nacho o Jordi Sánchez asegurarán una gran competitividad dentro de la plantilla de un López Garai que ha asegurado su predilección por dominar el juego y ser protagonistas teniendo el balón y haciendo daño con él.