A pocos días del arranque de LaLiga en el Estadio de la Cerámica, la Real Sociedad aún tiene cosas por pulir, tanto como tiene puntos positivos para dar el mejor inicio en la competencia que significará la prueba de fuego para Asier Garitano y sus dirigidos en un nuevo ciclo.

Puntos fuertes

Realmente, la pretemporada de la Real Sociedad ha sido mala y en ningún partido han podido demostrar íntegra seguridad a pesar de competir contra equipos de su mismo potencial y calidad. Sin embargo, los donostiarras han mantenido algunas características que dan esperanzas para hacer de la nueva temporada, mejor que la anterior.

El uso de Igor Zubeldia como defensor central ha sido un buen punto, debido a las ausencias de centrales por lesión durante los tests veraniegos, el de San Sebastián ha sido muy sólido, serio y hasta ha colaborado con un gol durante los encuentros amistosos.

Mikel Oyarzabal ha sido una de las mayores garantías para la plantilla txuri-urdin, además, tras renovar contrato, solo afirma que seguirá dando alegrías a la afición. Su actividad en varios partidos ha sido uno de los puntos altos del cuadro dirigido por Asier Garitano, siendo referente del ataque y el jugador más peligroso.

Oyarzabal seguirá siendo de la Real. | Foto: Real Sociedad
Oyarzabal seguirá siendo de la Real. | Foto: Real Sociedad

Los ascensos de jugadores del filial dejan mucha ilusión, tanto Sangalli, Merquelanz y Gorosabel dan mucha esperanza de ser buenas opciones de relevo para el técnico.

Las llegadas de Theo y Merino, aunque aún no terminan de asentarse, dan mucha esperanza de reconciliar a la Real con los buenos resultados y empezar con buen pie aportando desde sus respectivas posiciones.

Tras mucho tiempo esperando su oportunidad estelar, parece que las cosas pintan bien para Rubén Pardo, el de Logroño ha tenido una discreta, pero buena actuación durante la pretemporada, por lo que Garitano lo empezaría a tomar en cuenta como una de las mejores opciones para acompañar a Illarra en el cuarto de máquinas, compitiendo con el recién adquirido Merino.

Puntos flacos

La pretemporada dejó expuestas muchas falencias de la Real Sociedad, algunas ya vistas desde la era Eusebio y encubiertas por la corta era de Imanol Alguacil. Los deslices defensivos son la mayor enfermedad de esta Real Sociedad, los centrales padecen de lesiones antes del arranque de la temporada y eso ha sido un gran problema durante las pruebas estivales, donde se encajó gol en la mayoría de encuentros. Los problemas en la zaga serán el punto de mayor dedicación para Garitano, quien debe trabajar en la línea ideal y tomar la decisión del arquero titular, ¿será Rulli o Moyá? Quizá por lesiones, el argentino parte con ventaja.

En cuanto al ataque, el equipo tiene muchas dificultades para hacer goles, algo sobresaliente en los últimos partidos preparativos, un percance para Garitano que no tiene más opciones que Juanmi, quien trabaja mejor como revulsivo, Willian José, quien escasas ocasiones conectó con sus compañeros y tuvo que bajar a la medular para recuperar balones; Jon Bautista no termina de levantar y Agirretxe no recupera el ritmo tras la lesión que le diezmó por bastante tiempo.

Los experimentos de Garitano no han surtido el efecto deseado, en especial el adelantamiento de Zurutuza para trabajar como un atacante más cercano al área, haciendo que cambie sus funciones, quitándole ritmo y haciendo que exprese su incomodidad públicamente.

La Real aún tiene mucho por trabajar, inicialmente, esperar a que todos los jugadores alcancen su punto máximo de forma y arrancar de la mejor manera la campaña regular. Horas de dolor de cabeza para Garitano antes de visitar el campo del Villarreal con muchas más dudas que certezas.