El Fútbol Club Barcelona está a punto de comenzar la temporada 2018/19. Los azulgranas arrancan el próximo domingo, 12 de agosto, con la disputa de la Supercopa de España ante el Sevilla en Tánger. Tras conquistar la Copa del Rey ante los hispalenses, los pupilos de Ernesto Valverde quieren arrancar levantando el primer trofeo en disputa. Será, además, el primer test en partido oficial, donde se comenzarán a vislumbrar las sensaciones de este nuevo Barça, mejorado en prestaciones tras el mercado estival. Hay que añadir la motivación de los catalanes por esta competición, puesto que hace un año la conquistó el Madrid, siendo además muy superior.

Éric Abidal en las oficinas de la Ciutat Esportiva Joan Gamper | Foto de Tomás Rubia, VAVEL
Éric Abidal en las oficinas de la Ciutat Esportiva Joan Gamper | Foto de Tomás Rubia, VAVEL

El Barça ha ingresado 124 millones por la venta de seis jugadoresPor primera vez en muchos años, en Barcelona quedan buenas sensaciones tras esta ventana de fichajes. Acostumbrados a las ventas a la baja y a regalar jugadores, la dirección deportiva, comandada por Éric Abidal, se ha puesto las pilas. Los números no engañan, pues el club ha ingresado 124 millones de euros por la venta de seis efectivos. La buena noticia es que todavía queda mercado por delante y esta cifra podría verse incrementada. No únicamente en el apartado de las bajas lo está haciendo bien el cuadro culé, sino también con las incorporaciones. La plantilla ha mejorado respecto al año pasado y ahora se ve un equipo mucho más sólido.

Plantilla equilibrada con más competencia

La campaña 2017/18 se cerró con la conquista de un doblete que dejó un sabor agridulce. Pese a coronarse con dos títulos, la eliminación en la UEFA Champions League a manos de la Associazione Sportiva Roma hizo mella en un vestuario que se veía cerca de cosechar un nuevo triplete. El análisis tras aquella caída fue complicado. La plantilla se desconectó en el momento clave, quedando apeado de la máxima competición europea. Con aquella, se sumaban tres temporadas sin conseguir pasar de los cuartos de final. Desde el club fueron conscientes de que la plantilla debía mejorar.

La incógnita será, de nuevo, la posición de Sergi Roberto: ¿Lateral diestro o centrocampista?Se ha intentado continuar con el proyecto que inició la temporada pasada. Si no hay ninguna salida de última hora, en portería seguirán Ter Stegen y Jasper Cillessen, siendo dos seguros cuando están sobre el verde. En defensa se ha ganado en fondo de armario, con la incorporación de Clément Lenglet, que se suma a Thomas Vermaelen como alternativas a Gerard Piqué y Samuel Umtiti, titulares indiscutibles con Ernesto Valverde en el banquillo. En el lateral zurdo se incorpora a Juan Miranda, futbolista con mucha proyección, que ha deslumbrado en esta pretemporada. Por la derecha sigue Nélson Semedo, con confianza del técnico, a expensas de ver dónde se ubica Sergi Roberto.   

Arthur, fichaje ilusionante, en el día de su presentación | Foto de Eduardo Ariño, VAVEL
Arthur, fichaje ilusionante, en el día de su presentación | Foto de Eduardo Ariño, VAVEL

El centro del campo gana en calidad tras las altas de Arturo Vidal y Arthur Melo. El primero viene como sustituto natural de Paulinho, jugador más físico para desatascar los partidos más complicados. El segundo, más creativo para generar fútbol. A ello hay que añadir los efectivos que ya están en el equipo, más la llegada de los cedidos como Rafinha o Munir arriba. En delantera, la llegada de Malcom dará un plus de competencia a un futbolista como Ousmane Dembélé y apuntala una línea en la que también podría haber salidas.

Las opciones tácticas de Valverde

Ernesto Valverde revolucionó la táctica en Can Barça la temporada pasada. Rompió con el 4-3-3 que había llevado al club a lo más alto para introducir el 4-4-2, siendo un cambio acertado que desconcertó a los rivales del Barcelona, puesto que ya conocían la forma de jugar de los azulgranas. Con esta modificación, los culés vieron cómo los suyos batían el récord de imbatibilidad en LaLiga Santander, que ostentaba la Real Sociedad y como se sumaba otro doblete histórico. En este nuevo ejercicio, contando los que han llegado (más alguna posible incorporación más), hay varias alternativas tácticas.

4-3-3: el sistema clásico en el Camp Nou. Los éxitos han llegado a la capital catalana con esta formación. Sergio Busquets hace el papel de pivote con un interior de más trabajo (Ivan Rakitić) y otro de creación, que a su vez ha de suplir la baja de Andrés Iniesta (Philippe Coutinho, Arthur Melo, Carles Aleñá, Denis Suárez e incluso Rafinha podrían actuar en esta posición). También hay otras opciones como poner a Sergi Roberto en la posición de 'Busi' para darle descanso al '5'. En el caso de Philippe, podría actuar también en el extremo zurdo (sacrificando a Malcom y Ousmane Dembélé, que juegan por el otro lado). En punta, Luis Suárez, con Leo Messi en la banda derecha.

La llegada de Vidal refuerza la idea de Valverde de tener un futbolista más físico, al estilo Paulinho la temporada pasada4-2-3-1: es una opción factible por el tipo de futbolistas que tiene el Barcelona, pero poco utilizada por el técnico la temporada pasada. Ante equipos con peligro en ataque, la fórmula del doble pivote aporta solidez y músculo en la medular. En este caso, las opciones son infinitas, pues Sergio Busquets, Sergi Roberto, Arthur Melo, Ivan Rakitić e incluso Arturo Vidal pueden actuar ahí. Más adelantado encontraríamos a Leo Messi como distribuidor de juego, con dos bandas rápidas (Philippe Coutinho en la izquierda, Malcom/Ousmane Dembélé en la derecha) y Luis Suárez en punta de ataque.

4-4-2: este sistema presenta dos variantes. La primera es con un centro del campo en forma de rombo, con un pivote, dos interiores y un mediocentro ofensivo. La temporada pasada ya se optó por esta opción en algunos partidos. Para la presente campaña las posiciones las ocuparían Sergio Busquets, Ivan Rakitić y Arthur Melo en los interiores y Arturo Vidal por detrás de los dos puntas (Leo Messi y Luis Suárez), siendo la alternativa que más gusta a Ernesto Valverde. La otra variante sería jugar con el centro del campo en línea, por lo que las bandas las ocuparían futbolistas más rápidos (Philippe Coutinho, Malcom o Ousmane Dembélé) y en punta de ataque, se quedarían Luis Suárez y Leo Messi.

El papel de los 'suplentes'

Con un ejercicio tan exigente por delante, los azulgrana necesitan contar con más efectivos, aparte de los titulares. Ernesto Valverde tendrá un 'once tipo', con los futbolistas de su agrado, pero los demás deberán dar un paso al frente con el objetivo de intentar arrebatar la titularidad a los que estén sobre el verde para, de este modo, incrementar todavía más la competencia en la plantilla. De vital importancia será también la adaptación de las piezas que suban del filial.

Carles Aleñá en el Miniestadi la temporada pasada | Foto de Noelia Déniz, VAVEL
Carles Aleñá en el Miniestadi la temporada pasada | Foto de Noelia Déniz, VAVEL

Los menos habituales tendrán una oportunidad para demostrar de lo que son capacesDenis Suárez, Rafinha, Munir, entre otros. El equipo necesita que su rendimiento sea el máximo posible para tener alternativas reales sobre el terreno de juego. En la anterior campaña se criticó a Ernesto Valverde porque utilizó a los mismos 14 jugadores, provocando una situación que terminó con el desgaste psicológico y físico de los mismos. Los años son muy largos y es importante llegar en buena forma al final, puesto que es cuando los títulos están en juego.

Por otra parte, al hilo de lo comentado anteriormente, será importante ver la adaptación que tienen los futbolistas que suben desde abajo. El abanderado de La Masia es Carles Aleñá, que tras destacar en el filial, tendrá la oportunidad de triunfar en el equipo de su vida. Habrá que ver cómo gestiona el técnico azulgrana los minutos del centrocampista catalán, pero en Can Barça confían mucho en él. Otro de los nombres que suenan para llegar al primer equipo son el de Juan Miranda o Sergi Palencia. Ellos son la esperanza de la cantera y deberán demostrar que el modelo no está en decadencia.