El Getafe afronta una nueva temporada llena de desafíos donde esperan poder superar todos sus objetivos. Cuentan con una plantilla capaz de darlo todo cada fin de semana por lograr alcanzar esas metas. Gracias a los fichajes realizados este verano y la base con la que ya contaban, los azulones se presentan en este inicio de Liga con un gran repertorio de futbolistas elaborado minuciosamente para poder competir. Entre todos ellos, destaca principalmente Djené Dakonam. El togolés tuvo una de sus mejores temporadas como profesional en el Getafe, y habrá que estar atento a cómo sigue desarrollando su fútbol.

Es la viva imagen del prototipo de ejemplo de superación. Hace tres temporadas jugaba en Segunda División con el Alcorcón, donde actuaba como lateral. Las circunstancias, su interesante físico y su inteligencia, le han llevado a ocupar el puesto de central siendo uno de los más prolíficos de LaLiga Santander. Muchos equipos, sobre todo de la Premier League por su alto presupuesto, pusieron ofertas sobre la mesa para llevarse a Djené. El club azulón estuvo a punto de apretar el gatillo en varias ocasiones cuando pusieron sobre la mesa cantidades cercanas a los 35 millones de euros, pero el togolés ha demostrado valer mucho más que eso.

Intensidad, velocidad e inteligencia

Djené representa los valores que se buscan en este Getafe de Bordalás. Una pieza que encaja a la perfección en el sistema defensivo del entrenador alicantino. Cuenta con una coordinación al alcance de muy pocos que le hace ser deseado por muchos equipos. No es el más fuerte ni el más alto, pero no tiene miedo a verse la cara con nadie. Sus mejores partidos de la temporada pasada llegaron frente a clubes como el Real Madrid, Barcelona o Valencia. Es un futbolista que se viene arriba en los grandes momentos y suele responder bien a cada uno de ellos.

Lee el juego como muy pocos, lo que le permite poder arrebatar el balón de los pies de cualquiera. Muchos grandes atacantes de LaLiga Santander intentaron deshacerse de él, pero en pocas ocasiones le ganaron la batalla. Tiene un instinto de supervivencia impropio de este deporte que le permite salvar ocasiones peligrosas en el último momento. Un central ágil y flexible, algo difícil de encontrar hoy en día. Su cuerpo le permite contar con una potencia y una fuerza propia de un central, pero desconocida por él mismo hasta hace poco tiempo. Su temporada en el Getafe ha sido una de descubrimiento personal, y sabiendo ya cuáles son sus dotes más destacados, quiere ponerlos en práctica para ayudar a su equipo a ganar.