El Rayo Vallecano, después de dos años en la categoría de plata, vuelve a disputar partidos en la máxima competición del fútbol español. Enfrente, tendrán a un rival de los más complicados que podrían echarse en el primer partido, el Sevilla. Además de que el rival sea uno de los más fuertes de LaLiga, los franjirrojos aún no tienen construido su equipo y faltan fichajes por cerrarse, que serán importantes a lo largo de la competición. A eso, hay que sumarle dos bajas importantes con las que tendrá que contar Míchel, Velázquez, que se conoció su lesión pocas horas antes del partido, y Santi Comesaña, que está sancionado.
Santi Comesaña se pierde el estreno liguero
El gallego, que es un encaje perfecto para sustituir a Elustondo -que probablemente saldrá de titular, pero no juegue los 90 minutos tras haber estado entrenando unos días al margen-, no podrá saltar al césped de Vallecas hasta la jornada tres, frente al Athletic de Bilbao. Donde sí podrá hacerlo será en el Wanda Metropolitano, contra el Atlético de Madrid.
El centrocampista, que se pierde el encuentro por acumulación de tarjetas amarillas, no gozó de todo el protagonismo que esperaba la pasada campaña. A partir de su golpe en la cabeza frente al Numancia, aquel que puso a la afición del Rayo más que nerviosa, y con razón, su participación no volvió a ser la misma.
Cabe destacar que en la primera vuelta del año anterior, Santi Comesaña disputó más de 1.500 minutos bajo las órdenes de Míchel, mientras que en la segunda, y más decisiva del campeonato, el gallego no se acercó tan siquiera a los 1.000 minutos sobre el césped. Sin duda, un dato sorprendente que desvela que otros compañeros estaban por delante de él a la hora de realizar el once, e incluso cuando el técnico proponía la sustitución de algún centrocampista. Al margen de este partido, queda por ver cuál será el papel de un futbolista que ha ofrecido garra y buenas sensaciones en pretemporada.