El domingo 7 de octubre a las 20:00 horas se podrá presenciar en el coliseo gaditano una nueva jornada de liga, un partido entre dos equipos que llegan con el agua al cuello tras un comienzo de temporada muy flojo y que hace que ambas escuadras se vean obligadas a reaccionar pronto para remontar el vuelo.

Los tarraconenses, tras dos años consiguiendo la salvación por los pelos, parece que no han sabido aprender la lección y un año más se ven abocados a pelear por seguir en la división de plata hasta el último suspiro. José Antonio Gordillo cogió las riendas del equipo el año pasado y consiguió darle un vuelco a la situación para lograr la permanencia, el entrenador de Morón de la Frontera (Sevilla) se ganó la renovación por una temporada más.

El equipo ha sufrido este verano una importante remodelación de la plantilla, dando baja a jugadores que eran piedras angulares como el capitán Xavi Molina o Sergio Tejera, pero también haciendo un número importante de fichajes. El portero Isaac Becerra, la vuelta de Rocha tras su fugaz paso por Oviedo o la incorporación de Manu del Moral para reforzar la delantera son alguno de los nombres llamados a ser importantes esta temporada.

La táctica empleada por Gordillo es un 4-4-2 intentando buscar mucho las bandas, con extremos que entran hacia el centro para permitir la subida de los laterales hasta linea de fondo. Su punto débil hasta el momento es algo que también le esta pasando al Cádiz, un centro del campo que se desgasta mucho en defensa pero que conecta poco en ataque y carece de profundidad. Son un equipo bastante equilibrado y sin estrellas, pero en el que destacan dos ex cadistas en sus filas como son Raúl Albentosa y Manu Barreiro.

Cuando parecían adquirir mejores sensaciones tras una victoria ante Osasuna y un empate fuera ante el Reus, llegó una nueva derrota en casa ante el Deportivo de la Coruña. El Cádiz debe dar un golpe en la mesa y ganar de nuevo en casa ante uno de los equipos que de momento, están llamados a estar abajo.