Hay un dicho popular que se extiende por la afición del Real Madrid que dice: “Fuera del Madrid, hace mucho frío”. Se aplica a aquellos jugadores que deciden emprender un nuevo camino lejos de la capital de España y que no terminan de triunfar. Pero es que, desde la salida de Cristiano Ronaldo a la Juventus, parece que el que está pasando frío es el Madrid, al menos en la búsqueda del gol, que en Rusia volvió a congelarse. Una misión que se le está atragantando en los últimos partidos, quizá en demasía, al conjunto blanco. Acumulan tres partidos consecutivos sin ver puerta. Unos datos que no se daban desde hace más de una década cuando aún Capello comandaba el barco y el Madrid tenía nueve Copas de Europa. 

Ni blanco, ni negro

Parece que el Benzema que comenzó la temporada no era más que un falso espejismo. Da la sensación que Bale no termina de ser el líder llamado a ocupar el puesto de Cristiano Ronaldo. Asensio no despega y tampoco acaba de mostrar el nivel que tiene dentro. Sin embargo, igual que hace dos semanas ante la Roma el Madrid no era el mejor equipo de la historia, ahora tampoco es una banda. Ya lo dijo Julen Lopetegui en rueda de prensa tras la derrota en Rusia: "Ni hace diez días éramos invencibles, ni ahora somos tan malos".

En el derbi se mereció más y contra el CSKA los palos le privaron de conseguir los tres puntos. Los rusos aprovecharon el inusual error de Kroos para hacer su partido. El día de la Roma Bale sí parecía el jugador por el que se pagaron algo más de 100 millones de euros. Asensio dejaba detalles de fenómeno y Benzema se llevaba una ovación cuando salió por Mariano. No todo es negro o blanco, también hay grises. Y el Madrid ahora mismo está en ese punto. Nadie sabe si lo que está sucediendo es un simple golpe de la mala suerte o un problema estructural.

El Castilla de Lopetegui no marcó durante tres partidos en 2008

A Lopetegui hay que darle tiempo. Su equipo sigue empatado a puntos con el Barça en la primera plaza de la competición doméstica y, salvo catástrofe, se clasificará primero de grupo en Champions. Continúa siendo campeón de Europa, durante casi mil días, que son algunos más que los tres partidos que acumula sin marcar. No se debe dramatizar ni empezar a buscar culpables. Como dijo Isco, que espera llegar al Clásico de finales de mes: “La temporada es muy larga”. Habrá momentos buenos y no tan buenos, pero todavía es pronto para juzgar un proyecto como el que está abarcando Julen. Ahora el Madrid está pasando frío, quizá porque llega el otoño, pero ya saben que esto no es como empieza, sino como acaba.