La Real ganó 3-1 en San Mamés y conquistó La Catedral para llevarse los tres puntos, dando un premio a la afición y haciendo daño a las contras, a base de trabajo, presión y lucha. Los realistas suman once puntos valiosos, sumando una victoria en un derbi ganando moral y confianza para el resto de los partidos. Oyarzabal fue el jugador clave marcando dos goles desde el punto de penalti, y dando moral y motivación a la Real al ganar en Bilbao.

En los primeros minutos del partido en el derbi vasco en San Mamés, el Athletic impuso su juego físico y rápido para llegar más al área de Moyá. Durante la primera mitad, el "Euskal Derbia" el único equipo que controló el partido y creó más ocasiones de gol fue el Athletic. La Real se limitó a defender el resultado inicial, y buscar una jugada aislada para poner el primero del duelo. Los realistas fueron de menos a más y consiguieron ganar metros poco a poco hasta encontrarse en el estadio y tener las primeras oportunidades con Bautista como actor principal. El delantero centro titular en el derbi tuvo en dos remates dentro del área la opción de marcar el primero para los txuri urdin, pero no estuvo acertado.

En La Catedral los rojiblancos dominaron en el primer tramo del encuentro, buscando un gol que les adelantara en el marcador para ir con el resultado a favor. Yuri Berchiche, el lateral izquierdo zarauztarra ex jugador realista creó peligro por su banda ante un debutante como Gorosabel en esta temporada, y llegando muy fácil por la parte izquierda ofensiva local.  En una jugada a balón parado, una faceta del juego donde los de Berizzo se mueven como pez en el agua, Iñigo Martínez remató un centro que se marchó desviado de la portería del guardameta balear. Ninguno de los dos conseguía cambiar el resultado. La Real de Garitano se empezó a desperezar y quitar el miedo de encima. Logró superar el centro del campo y la presión adelantada de los leones, evitando así las llegadas peligrosas del Athletic a base de pelea, intensidad en el juego y jugadas a balón parado.

Los realistas pelearon para llevarse la victoria. | Foto: La Liga
Los realistas pelearon para llevarse la victoria. | Foto: La Liga

Siguió intentándolo el equipo txuri urdin igualando más si cabe el derbi, y respondiendo a los golpes a los rojiblancos. En una jugada a balón parado, con el centrocampista riojano poniendo el balón, Sangalli remató  y recibió una falta de Iñigo Martínez dentro del área. El VAR lo revisó y acertó porque el ex central realista subió demasiado el pie al levantarlo hasta la cara de Sangalli. Oyarzabal asumió la responsabilidad y anotó con sangre fría para adelantar en San Mamés a los realistas, poniendo tierra de por miedo para conquistar y ganar el derbi en La Catedral.

Oyarzabal actor principal del derbi. | Foto: Real Sociedad
Oyarzabal actor principal del derbi. | Foto: Real Sociedad

Sin embargo, poco le duró la alegría a los realistas. Muniain empató la contienda, en una jugada algo agraciada para el Athletic, pero que empezó con un recurso técnico del centrocampista navarro que regateó a varios jugadores realistas y se fue, y acabó en un centro de Susaeta que tras rebotar en Illarramendi remató sólo en el área pequeña Muniain. El Athletic dejó el empate a uno en el marcador, antes de marcharse a los vestuarios y dejando abierto el partido para la segunda parte.

Gol rápido de Sangalli y presión intensa y alta realista

Tras la charla de Garitano en el vestuario a sus jugadores, viendo que el Athletic había controlado la primera parte y habían llegado con más peligro, los realistas comenzaron mejor la segunda parte. La Real mejoró al entrar en la segunda parte con más intensidad, una presión alta y asfixiante que desembocó en el segundo gol txuri urdin. Zubeldia, Sangalli y Bautista cerraron el pase a Yuri, y Zubeldia subió por la banda centrando un balón al segundo palo donde apareció Sangalli y remató a placer, marcando un gol psicológico y celebrando el gol con rabia al mandar en el derbi vasco.

Sangalli marcó el segundo que adelantó a la Real. | Foto: La Liga
Sangalli marcó el segundo que adelantó a la Real. | Foto: La Liga

Al Athletic le hizo daño el gol, pero no cesaron en su intento de buscar el empate. Los realistas defendieron el resultado con uñas y dientes, saliendo al contraataque y formando dos líneas de cuatro para cerrar los espacios para los rojiblancos, siendo un muro infranqueable. No terminaron de meterse en el choque y la Real se sintió cómoda defendiendo. Garitano metió más pulmó al equipo y formó una muralla defensiva para aguantar el 1-2 a favor, metiendo a Zurutuza por Pardo, dando más consistencia y queriendo tener algo más el balón.

El Athletic no llegó a tener ocasiones claras y la eficacia necesaria para ganar el derbi. Además, falló en defensa estrepitosamente y el sistema de Garitano venció. Oyarzabal marcó de penalti, sentenciando el partido y llevándose los tres puntos de Bilbao a San Sebastián, consiguiendo una victoria que da moral a los txuri urdin. Ganó el derbi y más que eso, tres puntos vitales para la lucha por Europa.